Están metiendo goles, rodando películas y liderando países. Pero no se confundan, no es necesario ser rico, guapo y/o famoso para abrazar esta condición. Los narcisistas, campan a sus anchas en todos los ámbitos de la vida y seguro que ustedes tienen uno al lado. Con el riesgo que supone establecer teorías generales para algo de este calado, el experto en comportamiento Thomas Erikson se aventura y afirma que el narcisismo va en aumento.
“Personas que hablan de sí mismas sin cesar, que anuncian sus increíbles conocimientos, habilidades, experiencia y credenciales al mundo entero; que se sienten con derecho a lo mejor de lo que la vida les ofrece; que se creen mejores, más atractivas y con más éxito que sus iguales; que se hacen centenares de selfis, los revisan todos a conciencia para seleccionar el mejor de ellos y luego montan en cólera si no recibe tantos ‘me gusta’ como consideran que merece. Son esas personas que hacen todo lo posible por estar a la moda, que le dan gran importancia a que las vean y que parecen estar dispuestas a casi cualquier cosa por destacar. Se enfadan cuando el éxito que esperan no se materializa y sucumben al lloriqueo quejicoso cuando las cosas no salen como quieren. Puede que estés pensando que gente así ha habido siempre. Antes nos decíamos para nuestros adentros: '¡Menudo imbécil!'. Hoy en día, la gente ya ni levanta una ceja ante esa clase de comportamiento. Es la nueva normalidad”, señala Erikson en su última obra.
El autor señala que solo entre un 1 y 2% de la población sufren del trastorno narcisista de la personalidad, pero que los “comportamientos narcisistas” están mucho más extendidos y achaca a las redes sociales como uno de los principales causantes de su auge. Tras el best seller Rodeado de idiotas, el escritor acaba de publicar Rodeados de narcisistas y atiende a Vozpópuli en una entrevista.
Respuesta: Sí, creo que ha estado aumentando desde, tal vez, hace veinte, veinticinco años. Y de hecho, creo que las redes sociales son una de las razones principales, posiblemente no la única, pero las cosas se extienden tan rápidamente hoy en día en línea. Hace veinticinco años no sabías nada de tu vecino y hoy en día alguien estornuda en Madrid y en dos minutos se sabe en Buenos Aires. Así que el narcisismo es perfecto para las redes sociales. Se extiende, es un comportamiento que además se ve promovido por las redes, pero no es la única razón. Desde luego es una de ellas, y poderosa.
P: ¿Qué otras razones encuentra?R: Cómo educamos a los niños hoy en día, y en comparación con hace cincuenta años. Si le hacemos pensar al niño que es el único en el planeta y que es absolutamente maravilloso, se lo acabará creyendo y actuará como tal. Y luego te encuentras con otros niños que también piensan lo mismo y el problema está servido. Si nunca enseñas a los niños a aceptar un “no” como respuesta, estarás creando un narcisismo, sin duda.
P: Marca el inicio del auge del comportamiento narcisista en los años 70. ¿Por qué cree que sucedió?R: Creo que efectivamente corre parejo con el movimiento del desarrollo personal. Los mentores, los gurús, los conferenciantes, los expertos escriben sobre quererse, desarrollarse. Son cosas buenas, desarrollar la autoestima, efectivamente, son cosas antiguas como el Nuevo Testamento. Pero se puede abusar de esto y, de hecho, si nos pasamos de rosca y nos olvidamos de los demás, caemos en el narcisismo. Un buen coach es que te quieras, seas tú mismo y que construyas tu autoconfianza, pero que también contribuyas a la sociedad, que devuelvas algo a la sociedad y hagas algo bueno. El narcisista tiende a tomar lo que quiere o lo que necesita y a no dar nada. Ahí es donde la cosa se convierte en dañina, y luego las redes sociales han acelerado todo esto, como decía antes.
P: Mencionando el tema de las redes sociales. Acabamos de volver de la playa, hemos puesto en nuestras redes las fotos en la playa, los platos que hemos probado, los atardeceres... ¿Es esto narcisismo?R: Depende de tus objetivos, si lo que quieres es compartir tus experiencias con tus amigos y que vean lo que haces, vale. Si lo haces con el único propósito de que todo el mundo propios y extraños, te admiren y te den 'likes', entonces yo creo que ahí hay un problema.
P: ¿Subir este contenido a redes no es una variante o una adaptación de lo que hacíamos hace años enseñando nuestros álbumes cuando alguien venía a casa?R: Pero eso eran tus amigos o tu familia, gente cercana. Ahora enseñas tu vida al mundo entero, todo el mundo ve que estás ahí en la playa y lo que comes, etc. ¿Y por qué es importante que todo el mundo lo vea? Podrías mandar un e-mail... Estoy bromeando un poco, pero ¿entiendes? Lo que quiero decir es que la razón, la motivación detrás de la acción es captar la atención, ser un foco de atención, y efectivamente, ahí, estás ya en una zona peligrosa. Estás al filo de la navaja, y cuando no recibes la atención que crees que mereces, te sientes mal. Ese es realmente el peligro del narcisismo.
P: Con el fenómeno de los selfis se produce una curiosa reacción entre muchos usuarios, que terminan sintiéndose peor cuando luego se miran al espejo y ya no está ese filtro de Instagram.R: Claro, eso ocurre, es totalmente cierto. Es no aceptar lo que eres o cómo estás en la vida. Por eso los narcisistas envidian a otras personas que parecen más jóvenes o más ricas. Lo que evidentemente todos queremos es estar lo mejor posible, pero ahí llega un punto, llega un grado, en que eso no es sano, no es normal.
Los narcisistas en la política están a derecha y a izquierdasPregunta: Menciona también a los estudiantes universitarios que organizan una turba o un boicot para que no se escuche a personas que opinan diferente a ellos, en lugar de confrontar estas ideas. ¿Por qué considera que esto también es narcisismo?
Respuesta: Son como una manada de hienas en la sabana. Una no puede luchar contra el león, pero si son 25, sí que pueden. Entonces unen fuerzas, se reconocen como operadores y, por alguna razón, van en contra de un tercero, no sabemos por qué. Puede ser que no les guste su opinión o se sienten ofendidos, no sabemos, pero se reúnen y atacan a un individuo. Es narcisismo colectivo porque, de hecho, es una banda de narcisistas y el ejemplo de esto es la cultura de la cancelación. Cuando intentas destruir la reputación de alguien o su carrera o que no sean capaces de ganarse la vida o de expresar sus opiniones. Hay gente que, siendo atacada así en internet, ha llegado a pensar en quitarse la vida. Y esos depredadores no piensan y les importa poco el efecto de lo que hacen. Se pueden llegar incluso a sentir bien. Sería incluso en el grado máximo como los sádicos que se sienten bien haciendo daño. En internet se ve mucho porque además solo actúan así en línea. Eso presencialmente no se ve. Tienen esa cobardía de actuar en internet.
P: ¿Es Trump el paradigma del político narcisista?R: Tal vez. Evidentemente, es un narcisista. No lo negaré. Pero es un tipo interesante porque, de hecho, logra cosas. Cuando escuchas una entrevista con Donald Trump, el 90% del tiempo está hablando de él: 'He hecho esto, he hecho lo otro'. Pero el asunto es que a veces tiene razón. Ha hecho cosas buenas, aunque sus oponentes políticos evidentemente no están de acuerdo con esto. Lo entiendo. Pero es un narcisista con cierta eficacia. Ha construido una industria multimillonaria con su nombre en todas partes. Es fascinante porque cuando lo escuchas hablar, realmente es algo muy loco. Dice cosas que realmente no tienen filtro, porque él realmente cree que puede salirse con la suya siempre. Pero no hay que equivocarse. Los narcisistas en la política están a derecha y a izquierdas. El narcisismo no tiene color político.
P: Igual que usted considera que está creciendo el narcisismo de manera generalizada en la sociedad, ¿también está creciendo entre los grandes líderes mundiales, entre los presidentes de países y jefes de Estado?R: El mundo está básicamente en manos de narcisistas y psicópatas. Y es demasiado tarde para pararlo porque suben como la nata. En cualquier jerarquía política, empresarial, en cualquier lado, tenemos cada vez más narcisistas y comportamientos narcisistas. Porque son buenos jugando ese juego.
P: Leyendo el libro, uno se lleva a la sensación de un poco pesimista de que un narcisista no puede cambiar su comportamiento. ¿Es posible que se dé cuenta del impacto negativo que tiene sobre los demás?R: Por desgracia, es así. Los narcisistas no cambian porque no quieren cambiar. ¿Por qué iban a cambiar si les funciona? ¿Por qué no seguir haciendo lo que hacen? Normalmente no escuchan a nadie. Y no les funciona la terapia porque no escuchan. Todo lo vuelven contra los demás. Son los demás los que tienen los problemas, no ellos. Es como decirle a un gato que no cace ratones. ¿Y por qué haría eso si es un gato? Por supuesto, va a seguir cazando ratones. Los va a matar y se los va a comer. Funciona. Y ellos funcionan así. No tienen razón para cambiar.
P: Y para terminar, recordando otro de sus libros, Rodeado de idiotas, ¿qué hay más en el mundo: idiotas o narcisistas?
R:
Buena pregunta. Los idiotas es una cuestión irónica, a veces consideramos a los idiotas a los que piensan diferente a nosotros. Lo que ocurre es que en ocasiones el idiota y el narcisista coinciden.
vallecas
He caído en la trampa de leer su columna, de perder el tiempo nuevamente. Como seguro que la tecnología detecta una lectura le haré un comentario. Ha perdido la oportunidad de hacer la pregunta. ¿Es Sánchez el paradigma de político narcisista?