Cada año, en España mueren 40.000 personas a causa de un ictus. También conocido como accidente cerebrovascular, embolia o trombosis, esta enfermedad afecta anualmente a entre 110.000 y 120.000 personas de las cuales un 50 por ciento queda con secuelas discapacitantes o fallecen. Sin embargo, según la Sociedad Española de Neurología el 90 por ciento de los casos se podrían evitar con una adecuada prevención de los factores de riesgo y un estilo de vida saludable.
Según Quirón Salud, el ictus, que es más frecuente a partir de los 55 años y su riesgo aumenta proporcionalmente con la edad “ocurre cuando se interrumpe o reduce el suministro de sangre en una parte del cerebro, lo que impide que el tejido cerebral reciba oxígeno y nutrientes causando la muerte de las células cerebrales en pocos minutos. Esta falda de riego sanguíneo puede causar daños permanentes a nivel cerebral e incluso la muerte”.
Desde hace años, los expertos advierten de la importancia de saber identificar los síntomas de un ictus para poder actuar rápidamente con el fin de evitarlo. El tiempo de reacción es un factor clave para impedir un mayor daño cerebral.
Desde la Fundación Española del Ictus nos apuntan que los síntomas del ictus son:
- La pérdida de fuerza o sensibilidad
- Debilidad en la cara, brazo y pierna de un lado del cuerpo
- Visión doble
- Sensación de vértigo
- Alteración repentina del habla
- Dolor de cabeza súbito
Los factores de riesgo que debes controlar para evitar sufrir un ictus
Aunque en las dos últimas décadas la mortalidad y discapacidad por ictus han disminuido gracias a una mejora en la detección precoz de los síntomas y el control de los factores de riesgo, desde la Organización Mundial de la Salud se estima que en los próximos 25 años su incidencia crezca un 27 por ciento.
Por ello, además de saber identificar los síntomas, es necesario controlar los factores de riesgo. Teniendo en cuenta que hay algunos no modificables, como la edad, la raza o la genética, según los expertos, otros sí lo son:
- Llevar una dieta saludable: tal y como aconsejan los expertos y relevantes instituciones como la Organización Mundial de la Salud, llevar una alimentación sana y equilibrada es clave para el buen estado de la salud y para evitar enfermedades y afecciones como el ictus. Para ello, se recomienda una dieta variada rica en frutas, verduras, pescado y legumbres, baja en grasas y en sal.
- Realizar actividad física de manera regular: el sedentarismo se asocia al aumento de colesterol, hipertensión y obesidad, entre otros. Los expertos recomiendan practicar deporte de manera regular para proteger frente a diferentes enfermedades.
- Controlar la presión arterial: la hipertensión es uno de los principales factores de riesgo para sufrir un ictus. Por ello, es importante medirse la tensión de vez en cuando para confirmar que se encuentra dentro de los valores saludables y, en caso de que no sea así, poder bajarla.
- Dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol: los expertos recomiendan abandonar los malos hábitos para gozar de una buena salud. El tabaco y el alcohol están directamente relacionados con varios de los factores de riesgo para sufrir un accidente cerebrovascular.
- Revistar el colesterol: también se recomienda controlar los niveles de colesterol de forma periódica. Estos tienen que ser inferiores a 200 mg/dl.
- Reducir el estrés: se ha detectado una relación entre los niveles elevados de estrés y los casos de ictus, por lo que llevar una vida tranquila y sin agobios también tiene efectos preventivos.
- Examinar los niveles de azúcar para mantener unos niveles de glucosa en sangre adecuados y recibir las pautas médicas para ello en caso de ser necesario.
- Controlar el peso: el sobrepeso es uno de los factores de riesgo, por lo que controlar el exceso de kilos es fundamental.
hulk1965
¿De no vacunarse no dicen nada?