El Archivo de Villa es probablemente la institución más antigua de Madrid, según su actual directora, Gloria Donato. Su documento más antiguo pertenece al siglo XII. Desde Carlos III es oficina pública, por lo que tiene como vocación la atención al ciudadano, una vocación que mantiene con todo su vigor. El Archivo de Villa da servicio directo al ciudadano, pero también a todas las instituciones que de algún modo dependen de él. Digitalizan sus fondos desde 2006 para atender las necesidades del ciudadano, especialmente durante la pandemia cuando no podían consultarse directamente, y para contribuir a la preservación de los fondos.
Por su parte, Memoria de Madrid es el la biblioteca digital del Ayuntamiento. Da servicio al propio Archivo, pero también a otras instituciones, como la Empresa Municipal de la Vivienda, o el Gabinete de Prensa. A juicio de su director, Gilberto Pedreira Campillo, no hay que esperar a tener las condiciones ideales para iniciar un proyecto como ese, sino que hay que lanzarse, hacer pruebas, y aprender por el camino. Pedreira señala que una Administración Pública puede aprender mucho de la interacción con empresas, y observa que en ocasiones les ha ocurrido también lo contrario, que han sabido guiar en ciertos aspectos a empresas con las que han colaborado. Memoria de Madrid muestra algunas de sus contribuciones al conocimiento de la ciudad en el portal escond.es.