La expansión de los seres humanos está dejando sin espacio a los grandes felinos en el sudeste asiático, donde especies como el leopardo y el tigre están amenazadas o en peligro de desaparecer. Su presencia junto a poblados y ciudades ocasiona ataques puntuales, pero según dos recientes estudios podrían tener algunas ventajas inesperadas superiores incluso a los prejuicios que causan. En la India, por ejemplo, el equipo de Christopher O’Bryan ha estudiado con detalle el comportamiento de los leopardos que viven cerca de la ciudad de Bombay y ha descubierto que podrían estar salvando la vida a muchas personas cada año gracias a que se comen a los perros asilvestrados de la zona.
En un trabajo publicado en la revista Frontiers in Ecology and the Environment, los investigadores han analizado las interacciones entre la población de unos 35 felinos del parque nacional Sanjay Gandhi y las 350.000 personas que viven en las afueras de la ciudad en las que es frecuente ver leopardos en las calles o cazando en los garajes. Y lo que han visto, asegura O’Bryan, es que la presencia de estos depredadores puede ser beneficiosa para la población local, porque su dieta consiste en alrededor de un 40 por ciento de perros salvajes, que atacan periódicamente a los lugareños y los contagian de enfermedades como la rabia. En todo el país se calcula que hay unos 30 millones de perros asilvestrados y unas 20.000 personas mueren por la rabia cada año.
En estas zonas es frecuente ver leopardos en las calles o cazando en los garajes
“Aunque los leopardos están en conflicto con la gente porque se comen al ganado y son perseguidos a menudo”, explica el investigador en Nature, “demostramos que estos depredadores únicos pueden también ser beneficiosos para la sociedad”. En concreto, el estudio muestra que la población local de leopardos de las afueras de Bombay se comen unos 1.500 de estos perros cada año, lo que evita unas 1.000 mordeduras y unos 90 casos potenciales de rabia, además de los 18.000 dólares en ls que se estima el coste de retirar a los perros de las calles. “Las mordeduras de perro en estos suburbios son muy costosas para la gente”, explica O’Bryan. “Hay costes por los tratamientos médicos y la hospitalización, además de los costes asociados a horas de trabajo”.
No muy lejos de allí, en Bután, se da una situación muy parecida con la población de tigres y las aldeas limítrofes con su territorio. En un trabajo publicado hace unos días en la revista Biological Conservation, el equipo de Phuntsho Thinley ha documentado cómo estos grandes felinos podrían estar beneficiando a los campesinos de forma indirecta. En este caso lo que sucede es que los tigres, que eligen las zonas más alejadas y frondosas para vivir, desplazan a los leopardos y perros rojos (Cuon alpinus) hacia las zonas exteriores y limítrofes con las tierras de cultivo. Allí, estas especies depredan a los herbívoros que devoran las cosechas, como los jabalíes, de modo que los campesinos sufren menos daños y también su ganado.
En concreto, como explican en Scientific American, Thinley y su equipo han calculado que la presencia de un tigre reduce los daños en los cultivos en una cantidad de unos 450 dólares al año por familia y 2,4 animales, lo que les ahorras unos 1.120 dólares anualmente. Considerando que la renta per capita del país es de 2.200 dólares, los beneficios de vivir cerca de un tigre serían, según este estudio, mas que considerables.
Se trata de resaltar los roles ecológicos de los animales salvajes para justificar su conservación con argumentos
Los autores pretenden concienciar de la necesidad de reducir el número de trampas, en las que caen indiscriminadamente tigres y otros animales, e intentan que no se culpe al tigre de todos los males para evitar que su situación vaya a peor. Se trata, resumen Thinley, de “resaltar los roles ecológicos de los animales salvajes para justificar su conservación con argumentos, más aliña de vender la idea vaga de la importancia de conservarlos, algo que la gente en general no entiende ni acepta fácilmente”. En la misma linea se manifiesta O’Bryan sobre su estudio con los leopardos. “Muchas noticias se centran solo en el impacto negativo”, asegura. “Los leopardos pueden ser una amenaza, desde luego. Lo que estamos sugiriendo es que también podrían aportar beneficios. Y creemos que es importante tener en cuenta los costes y beneficios asociados a vivir en las cercanías de los depredadores”.
Referencias: Leopards provide public health benefits in Mumbai, India (Frontiers in Ecology and the Environment) | The ecological benefit of tigers (Panthera tigris) to farmers in reducing crop and livestock losses in the eastern Himalayas: Implications for conservation of large apex predators (Biological Conservation)
Imágenes: Ram's Foto (Flickr, Public Domain) | Rob Annis (Flickr, CC BY 2.0)