Que los monos capuchinos son suficientemente hábiles e inteligentes como para abrir nueces mediante el uso de piedras es algo bastante conocido. La práctica se ha observado en grupos que viven en la naturaleza y que heredan la técnica de generación en generación, pero los detalles sobre su forma de actuar aún ofrecían algunas incógnitas.
"Hasta ahora este nivel de destreza no se sospechaba de ningún mono".
El equipo de Madhur Mangalam, que lleva diez años estudiando este comportamiento, acaba de publicar una novedad que hasta ahora desconocíamos sobre estos primates: son capaces de modular la fuerza con la que golpean la nuez en función de lo rota que está y del tiempo que llevan tratando de cascarla.
"Los capuchinos salvajes barbados modulan dinámicamente sus golpes en función del resultado del golpe anterior cuando usan piedras a modo de martillos para abrir nueces", asegura Mangalam. Para el trabajo, que se publica en la revista Current Biology, los investigadores grabaron en vídeo a 14 ejemplares de capuchino mientras rompían nueces y el análisis de los movimientos les indicó que estaban siendo muy sutiles en la aplicación de la fuerza. "Fue un momento eureka", insiste el investigador principal. "Hasta ahora este nivel de destreza no se sospechaba de ningún mono".
En opinión de los autores, este trabajo ofrece una nueva perspectiva sobre el comportamiento de los primates y sobre capacidades que hasta hace poco se consideraban exclusivamente humanas. Acomodar la fuerza al requerimiento de la tarea, insisten, es un logro cognitivo que hasta ahora no se había registrado y que coloca a estos primates a la altura de especies como el chimpancé, a pesar de tener un cuerpo y un cerebro considerablemente más pequeños. La intención del equipo es analizar si otros animales están usando esta modulación de fuerzas sin que nos hayamos percatado hasta ahora.
Referencia: Wild Bearded Capuchin Monkeys Crack Nuts Dexterously (Current Biology) DOI: 10.1016/j.cub.2015.03.035