Los ocho partidos de suspensión con los que el Juez Único de Competición ha sancionado al Cholo Simeone no han gustado nada a algunos aficionados, especialmente del Atético de Madrid, que la consideran injusta teniendo en cuenta que a José Mourinho sólo le castigaron con dos partidos por meter el dedo en el ojo a Tito Vilanova, entonces ayudante de Pep Guardiola, precisamente en la Supercopa de España, en aquel caso entre el Real Madrid y el FC Barcelona.
Alfredo Flórez suspendió con dos partidos y 600 euros de multa al técnico portugués, aunque consideró su acción como leve, de ahí que le permitiera cumplirlos en la siguiente cita de la Supercopa de España que disputara, es decir, no en la Liga ni tampoco en la Copa del Rey, como sucede en el caso de Simeone. De esta forma, Mourinho sólo cumplió uno de los dos partidos de sanción que le fueron impuestos.
La gran diferencia es que en aquella ocasión fue el juez único de Competición quien decidió entrar de oficio y abrir un expediente extraordinario al considerar como grave la actitud de Mourinho y como leve la reacción del segundo técnico azulgrana. La apertura de este expediente fue algo inédito en el fútbol español. Sin embargo, en el caso de Simeone, el árbitro del partido recogió todos los incidentes en el acta.
La línea de defensa del Real Madrid se basó en que entendían que había mediado provocación del segundo técnico azulgrana y consideraban que no había elemento lesivo. Es decir, que Tito Vilanova nunca tuvo que recibir atención por la acción de Mourinho.
Tampoco el cuarto árbitro sufrió ninguna lesión tras las collejas de Simeone, pero el hecho de que el técnico del Atético se produjera "con violencia leve hacia los árbitros", según recoge el acta de Fernández Borbalán, le han supuesto cuatro partidos. A ellos se unen dos por las protestas, otro por aplaudir la decisión del árbitro y una más por desobederle y sentarse detrás del banquillo. Es decir, que mientras Mourinho sólo fue juzgado por una acción, el Cholo tenía hasta cuatro motivos para ser sancionado.