La rodilla izquierda de Cristiano Ronaldo sigue siendo un auténtico quebradero de cabeza. Lo es para el jugador que lo padece, para los censurados servicios médicos del club que no encuentran solución a la tendinitis que sufre y, por supuesto, para el Real Madrid que ve apagada a su gran estrella. No son pocos los problemas que asolan a CR7, pero éste le inquieta sobremanera porque no puede rendir al enorme nivel que acostumbra. El portugués lleva meses tratando su maltrecha rodilla con aplicaciones continuas de colágeno y de PRP (Plasma Rico en Plaquetas). Pese a las numerosas consultas realizadas a varios especialistas para encontrar una solución a la tendinitis que arrastra desde la temporada pasada, la inquietud no desaparece y por ello Ronaldo ha cambiado la manera de jugar y hasta su posición en el campo en pos de no machacar esa rodilla.
Su carácter competitivo no le permite relajarse si bien ha tenido que frenar ese impulso para proteger una articulación muy dañada. El doctor Noronha, médico de cabecera para CR7, ya le advirtió en junio del año pasado que debía detenerse para no poner en peligro su futuro debido al mal estado de esa rodilla. Este problema sin solución definitiva intranquiliza y atenaza al delantero desde entonces si bien el propio Cristiano no ha dejado de someterse a las infiltraciones de colágeno (proteína) para regenerar el tendón y de plasma enriquecido (para estimular la capacidad regenerativa de esta lesión). Esta semana y tras el descalabro en el derbi del Calderón, el equipo ha trabajado con más volumen físico si bien a CR7 se le vigila para que no acumule carga en exceso. Asimismo, el tratamiento y cuidado de los fisios ha sido el específico para su rodilla por lo que estará listo ante el Deportivo.
Ronaldo ha bajado su porcentaje de gol, no se encuentra cómodo en el campo, pero él no se rinde. Quiere estar en cada partido y ser decisivo. Como lo ha sido siempre. Sólo le frena la rodilla, que ha agudizado su malestar justo después de recibir en Balón de Oro. El bajón del equipo no termina de ayudar, tampoco la recomendación de Florentino Pérez de ayudar más a Gareth Bale (próximo Balón de Oro) y a eso hay que añadir otros asuntos que también afligen al crack portugués. Su ruptura sentimental le ha dejado 'tocado' y su representante Jorge Mendes no tuvo reparos en admitir que motivos personales han mermado su situación. "A veces tú estás caliente y tienes una discusión, y a veces.... pero lo que pasa es que es Cristiano y no es fácil ser Cristiano; es un ser humano y tiene momentos buenos y malos. Como todos", dijo el agente luso a ESPN.