Las autoridades suizas llevaron a cabo la madrugada del jueves una nueva serie de detenciones de dirigentes del máximo órgano de dirección del fútbol mundial, la FIFA, en una operación similar a la que ya tuvo lugar en mayo, según publicó hoy el diario estadounidense The New York Times. De acuerdo con la información del rotativo neoyorquino, que también fue el primero en publicar la operación de mayo, se trata de más de una docena de detenciones vinculadas a la investigación por corrupción que la Justicia de EEUU mantiene abierta contra la FIFA.
Por el momento se desconoce quiénes son los detenidos, aunque el periódico especificó que entre ellos no se encuentra el presidente del organismo, Sepp Blatter, y sí varios dirigentes del mundo del fútbol de Centro y Sudamérica. Por lo menos algunos de los arrestos tuvieron lugar en el hotel de lujo Baur au Lac de Zúrich, el mismo en el que se llevó a cabo la operación de mayo, y al que la Policía helvética accedió a las 06.00 hora local (05.00 GMT) a través de una puerta trasera. Entre los arrestados están los presidentes de la Confederación de Centrocamérica, Alfredo Hawit, y al de la Confederación Sudamericana, Juan Ángel Napout, quien puso como director general de la CONMEBOL a Gorka Villar, el hijo del presidente de la Federación Española.
Uno de los responsables del hotel indicó entonces a los visitantes que se encontraban en la recepción que debían abandonar el edificio porque se estaba produciendo "una situación extrema". Las detenciones fueron dirigidas contra altos cargos actuales y pasados de la FIFA a los que se acusa de "estafa, lavado de dinero y fraude" y se produjeron aprovechando la reunión de dirigentes de la organización en Zúrich esta semana. EEUU ha formulado cargos de corrupción contra un total de dieciocho personas, de los cuales siete ya fueron arrestados a finales de mayo.
EEUU pidió la extradición de todos ellos. Dos aceptaron voluntariamente ser trasladados, mientras que el resto rechazaron tal opción y sus casos están en trámite. Por su parte, la Justicia suiza realiza una investigación paralela, que involucra a Blatter, suspendido actualmente por noventa días, y al presidente de la UEFA, Michel Platini, por un pago de dos millones de dólares que éste recibió del primero en 2011.