La apuesta fue fuerte, pero se ganó. Un millón de euros de pérdidas que se multiplicarán en la élite del fútbol con los ingresos tras el ascenso a la máxima categoría, a una Primera División que ansiaban desde hacía un cuarto de siglo en tierras ilicitanas. Porque el ascenso del Elche, el quinto en su historia, le supone un pellizco considerable a las arcas de un equipo que sabía, muy convencido, a lo que jugaba.
Por partes. En la campaña de abonados para este curso 2012-2013 se planteó la posibilidad de devolver el importe del abono en caso de ascenso. Objetivo conseguido y a cumplir. “Será casi un millón de euros a repartir entre los 12.500 socios que tenemos”, asegura Jorge Pérez, director de marketing del club y artífice de la campaña. La devolución, eso sí, se hará en los carnets para la campaña del retorno a Primera. “Se descontará la cantidad que han pagado este año de lo que les valga la temporada que viene. En muchos casos les saldrá en Primera División por la mitad”, añade.
Pero la apuesta no quedaba ahí, porque en caso de no lograr el objetivo o de descender también se devolvería la cantidad invertida por los socios. “Sólo no se devolvería en caso de jugar el play off de ascenso y no ascender. Es decir, quedar entre el tercero y sexto y no lograr subir”, comenta Pérez. Tras dos años a las puertas, desde el Consejo de Administración existía la certeza de que, a las órdenes de Fran Escribá, se iba a lograr una meta que llevaban acariciando en los últimos tiempos.
Nueve mil fieles confiaron en el proyecto desde el inicio. 3.500 más se unieron en la campaña invernal, cuando el equipo ya iba como un tiro hacia el ascenso. “Ha sido un aliciente para muchos, pero desde el club sabíamos lo que nos jugábamos y, aunque tocará devolver ese dinero en los abonos nuevos, hemos ganado todos”, concluye Jorge Pérez.