Sepp Blatter se reunirá con el General Jibril Rajoub, ministro de Deportes Palestino y presidente de la federación de fútbol, para pedirle que quite la petición de suspender a la federación israelí. Los representantes palestinos llevan meses trabajando para que en el próximo congreso de la institución, que se celebrará el 29 de este mes, haya una condena a Israel y se inhabilite a sus clubes y selecciones para disputar competiciones internacionales. Ya en el último congreso de FIFA se intentó algo parecido, aunque en aquel momento se solucionó con palabras de buena voluntad de los representantes israelíes.
El presidente Blatter, que con toda seguridad será reelegido presidente en ese mismo congreso, no está por la labor de que haya batalla esos días, y por eso pretende que de la reunión con el ministro de deportes salga el compromiso de no llevar a cabo esta petición. El ministro no tiene previsto atender su petición y busca llegar hasta el final, lo que sería muy lesivo para los intereses isralíes. Alega el fútbol palersino que Israel no cumploe lo estipulado en los estatutos de la FIFA pues entiende que haay racismo y discriminación contra sus deportistas. "Estamos convencidos de continuar nuestro intento de suspender a la federación israelí en el próximo congreso, FIFA ha sido consciente de primera mano y sus intentos de encontrar una solución siempre han terminado en vía muerta", pone en boca del ministro un comunicado.
La federación palestina cree contar con apoyos suficientes para que la resolución salga adelante, pues cuenta con el voto tanto de los países árabes como de numerosos países africanos. En su declaración denuncian "el racismo sin castigo contra palestinos y musulmanes en el fútbol israelí, la restricción de movimientos para los jugadores, entrenadores y árbitros palestinos y ataques contra sus infraestructuras, incluyendo un asalto militar a las instalaciones de la federación palestina que la israelí nunca ha condenado".
