El exciclista Michael Rasmussen admite que se equivocó al afirmar que los españoles Óscar Freire y Juan Antonio Flecha, compañeros del danés en el Rabobank, estuvieran involucrados en las prácticas de dopaje que se llevaron a cabo en el equipo. "Había dopaje organizado, pero no incluía a todos los corredores", explicó Rasmussen. "Ni una vez en mi vida vi doparse a Óscar Freire. De Flecha tampoco sé nada", afirmó.
El exciclista danés Michael Rasmussen acusa en su biografía a todos sus compañeros del equipo Rabobank de doparse en el Tour de Francia 2007, en el que él mismo fue expulsado por su propio equipo. El Rabobank decidió expulsar a su corredor Rasmussen cuando, a falta de cuatro etapas, iba líder con más de tres minutos de ventaja sobre el español Alberto Contador -al final vencedor- por haber dicho que en junio se estaba entrenando en México cuando en realidad estaba en Italia, contraviniendo el reglamento antidopaje que obliga a los corredores a estar localizables para eventuales controles.
En su libro Fiebre amarilla, Rasmussen, que ya había acusado al canadiense Ryder Hesjedal y al director del Saxo Bank, Bjarne Riis, de prácticas de dopaje, señala también al equipo Rabobank al completo. Freire, Flecha y el ruso Denis Menchov negaron las acusaciones mientras que los holandeses Michael Boogerd y Thomas Dekker reconocieron haber tomado productos prohibidos. En una entrevista con la televisión danesa DR, Rasmussen relató que el exciclista danés Rolf Sorensen le introdujo en el uso de la cortisona y que él mismo llegó a pedir a su padre que le donara sangre para utilizarla con propósitos de dopaje. "En el equipo Rabobank, el cien por cien se dopó. No todos tomaban los mismos productos, pero todos estaban en alguna forma de dopaje suministrada por el equipo", afirmó Rasmussen.
El equipo Rabobank que compitió en el Tour 2007 estaba formado por Rasmussen, Dennis Menchov, Michael Boogerd, Bram de Groot, Thomas Dekker, Juan Antonio Flecha, Óscar Freire, Grischa Niermann y Pieter Weening. El médico de aquél equipo, el holandés Geert Leinders, fue contratado en 2010 por el Sky pero dejó la escuadra británica cuando empezaron a circular los rumores sobre dopaje en el Rabobank. Rasmussen reveló que, por indicación de dicho médico, pidió a su padre, Finn, que le proporcionara sangre para inyectársela. (Los padres) Sabían que tomaba medicinas para correr más rápido. Luego, al analizar las muestras, se descubrió que no eran compatibles, así que no se pudo hacer", admitió.
El exciclista danés achaca su expulsión del Tour 2007 a una falta de previsión por su parte, porque una simple llamada al periodista italiano David Cassani, el que reveló que estaba en Italia cuando supuestamente estaba en México, le habría bastado para ganar aquél Tour. "Si no me hubiera encontrado con Cassani, yo habría ganado el Tour de Francia, seguro. Tenía que haberle llamado para pedirle que callara y no habría dicho ni palabra, él mismo me lo ha dicho", comentó el danés a politiken.dk.
Rasmussen aseguró que su única motivación al revelar estas prácticas es su deseo de llegar a dirigir en el futuro a un equipo totalmente limpio. "Cuando mentía la gente me criticaba. Cuando un ciclista confiesa, la gente le critica por no decirlo todo. Ahora lo estoy contando todo. Me considero una de las personas más creíbles en el ciclismo porque puedo sacar toda la basura de una vez", afirmó. "Tengo la ambición de dirigir a un equipo en el futuro", reiteró, "y lo último que yo haría es gestionar un equipo bajo las condiciones en que yo corría. No podría vivir dirigiendo a un equipo como el Rabobank". El 30 de octubre pasado, Rasmussen había acusado a Bjarne Riis de estar al corriente del dopaje sistemático en el CSC, predecesor del equipo Saxo Bank, y de verlo doparse, además de implicar en prácticas similares a otros corredores daneses.
"Entré en la habitación del doctor Piet De Moor, donde también estaban Bjarne Riis y Tyler (Hamilton), que acababa de inyectarse synacthen y me invitó a unirme. Acepté. Bjarne no puso ninguna objeción", relata Rasmussen en su autobiografía. El episodio al que se refiere el exciclista danés, que corrió en el CSC en 2001 y en 2002, se produjo supuestamente en el Giro de Italia de 2002. Rasmussen, de 38 años, confesó en enero, al anunciar su retirada, haberse dopado durante toda su carrera, y colabora desde hace meses con las autoridades antidopaje danesas, a las que se cree ha denunciado a su antiguo director y ahora dueño del Saxo Bank, cuyo jefe de filas es el español Alberto Contador.