"Después del éxito en los Juegos de Pekín, las mujeres se me tiraban a los pies. Podía elegir a las que quisiera. Me ponía en plan... Bueno, a ver... ¿Esta? ¿O quizá esta? No, tú, tú, vente conmigo... Fue un sueño hecho realidad. Tenía 22 años y me daba la impresión de estar en una tienda de chuches". Así relata Usain Bolt en su autobiografía 'Como el rayo' algunas de sus vivencias.
El atleta jamaicano reconoce que el libro tiene una carga sexual. "Mi entrenador me quiso prohibir tener sexo, pero si le hubiera hecho caso, me habría vuelto loco. Yo lo tenía claro, para ser rápido y ganar a lo grande hay que darle caña". Coincidió con Sandra Bullock y Heidi Klum. "Se habían arreglado, estaban guapas... Nos lo pasamos genial, bailamos y bebimos champán, pero pese a lo que se ha dicho, no pasó nada... Aunque sinceramente, habría estado genial, porque... ¿quién da calabazas a Heidi o a Sandra?".
Bolt también comenta su experiencia con los porros: "Sólo probé uno y me pareció asqueroso. Cuando jugábamos al fútbol de pequeños en el parque había chicos que los pasaban y un día me lancé, pero me arrepentí de inmediato".