El técnico del Rayo Vallecano, Paco Jémez, evidenció su indignación después de perder por 5-0 ante el Albacete. "Ha sido una vergüenza, espero que este mensaje lo coja el club. Necesitamos más y mejores jugadores, es la conclusión que saco del partido”. El entrenador no se mordió la lengua: "Los que salieron en la primera parte no se merecían seguir en el campo ni seguir llevando la camiseta del Rayo. Les he cambiado a los once. Los de la segunda no se merecían ese castigo, se lo tenían que comer los de la primera pero no podía permitir que algunos jugadores lucieran la camiseta del Rayo porque no se lo merecían y mientras no se lo merezcan no se la volverán a poner”.
Jémez envió un mensaje a los dirigentes del Rayo: “Después de ver lo que han hecho algunos jugadores en el campo, el club tiene que hacer algo. Un equipo profesional no se puede permitir una primera parte así, es totalmente imperdonable. Espero que refuercen todas las posiciones que puedan, todas las que el presupuesto le permita”.
Pero el tono más grueso del discurso del técnico llegó al final: “Estamos para apretar los huevos, el culo, tenemos mucho trabajo por delante. Las sensaciones de hoy son horribles, vergonzosas y todo el mundo tiene que sacar conclusiones, sobretodo el club. A lo mejor es cambiar de entrenador, que también es posible”.
