El presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, estuvo en el congreso de peñas del club en Andalucía, Ceuta y Melilla, y ante un auditorio formado por unos 1.000 peñistas en el teatro Principal de Andújar (Jaén), se congratuló y agradeció los apoyos recibidos.
Rosell destacó la universalidad de la entidad, al tener 1.600 colectivos de apoyo en los cinco continentes, y rechazó la politización por el mosaico expuesto en el último clásico con el Real Madrid en el Camp Nou.
"Os damos las gracias por las muestras de ánimo y apoyo que siempre ofrecéis al equipo. Vuestro apoyo nos sirve para seguir con una labor de inculcar el barcelonismo por toda España y el mundo. Mientras yo sea presidente, el Barça no hará política", dijo Rosell, utilizando así un discurso muy distinto al que ha exhibido en Barcelona y por el que se ha dejado arrastrar, haciéndole el juego al president de la Generalitat, Artur Mas.
El presidente azulgrana rechazó que el Barça esté politizado y puso como ejemplo el partido con el Real Madrid: "el mosaico reflejó el nombre del Barcelona y la senyera y nunca se exhibió la estelada. Nosotros somos una entidad universal que cuenta con seguidores por todo el mundo".
Rosell explicó que "no sé qué mensaje os ha llegado, si está desvirtuado o no, pero yo os digo que desde que soy pequeño en el Barça ha estado la senyera, faltaría más, en el estadio y en los mosaicos. Una cosa es la identidad del club y otra hacer política. Nunca haría un mosaico con la bandera independentista en el Camp Nou".
