El inglés Nigel Stepney, exmecánico de Ferrari acusado en 2007 de espiar a la escudería italiana en favor de McLaren -para la que ese año pilotaban el doble campeón mundial español Fernando Alonso y el inglés Lewis Hamilton-, murió este viernes en un accidente de tráfico, informó el JRM Group, para el que trabajaba.
Stepney conducía su vehículo, una furgoneta Volkswagen, cuando se detuvo en el arcén. Al intentar volver a la carretera sufrió una fuerte colisión con un camión, según el atestado de la policía de Kent (Inglaterra). Los servicios médicos no pudieron hacer nada por su vida y certificaron su muerte en el mismo lugar del accidente.
En un comunicado, JRM Group señala que Stepney, de 56 años y que era gerente y director técnico del equipo de carreras de la empresa, deja a su mujer, Ash, y una hija, Sabine.
Stepney se incorporó a JRM en 2010 tras una larga carrera en Fórmula 1 que se vio mancillada en 2007 por acusaciones de que espió a Ferrari cuando era mecánico de la Scuderia en beneficio de la rival McLaren.
Un tribunal italiano lo condenó a veinte meses de cárcel por sabotaje, espionaje industrial y fraude deportivo, y, si bien no llegó a cumplir condena, no volvió a trabajar en Fórmula 1, apunta la cadena pública BBC.
JRM elogia en su nota las habilidades de Stepney y recuerda que fue el responsable de que JRM participara en 2012 en el Campeonato Mundial de Resistencia con un Honda LMP1. En 2013, el experto continuó desarrollando el GT-R Nismo GT3 y preparaba más avances para este año.
Rumsey afirma que el hombre que respaldó a Ayrton Senna en Lotus y a Michael Schumacher con Ferrari "era el candidato perfecto para establecer a JRM como un equipo serio en los circuitos del motor".
"Nigel era un competidor fiero e intenso y siempre aspiraba a la excelencia en nuestras carreras", agrega el dueño de JRM, que asegura que, fuera de la pista, era un "padre afectuoso".