El número de espectadores que siguieron por televisión el Mundial de Fórmula 1 en 2012 se redujo ligeramente respecto a 2011, pero el problema es que el bajón principal se produjo en los países más ricos o en los emergentes.
Mientras que la audiencia televisiva global cayó de alrededor de 515 millones en 2011 a poco más de 500 millones, en China hubo un descenso del 34%, en gran parte causado porque muchos grandes premios con horario europeo coincidieron con importantes eventos deportivos chinos.
En Rusia, país de incuestionable poderío económico y que organizará un GP de F1 el año que viene, los telespectadores descendieron un 13%. En la otra potencia histórica, Estados Unidos, ni siquiera el regreso del GP a su territorio, concretamente en Texas, evitó que un 3% menos de norteamericanos siguieran la F1.
También hubo desplome en la cuna del automovilismo, Gran Bretaña, en este caso porque el modelo de televisión cambió de abierto a mixto: alguna retransmisiones fueron en abierto (BBC) y otras de pago (Sky). Resultado: 3,8 millones de espectadores menos respecto a 2011. Y cuidado porque en Italia, Holanda y Francia también circulan hacia la F1 de pago.
"Un pequeño puñado de territorios no cumplieron con las expectativas en términos de alcance", admitió Bernie Ecclestone, presidente de Fórmula 1. "Además, la disminución del mercado chino no pudo ser absorbida por el aumento que se produjo en otros lugares".
Entre esos países donde el número de espectadores fue mayor que en 2011 están Brasil, España e Italia. El mercado televisivo brasileño creció un 8,9%, llegando a un total de 85,6 millones de espectadores en 2012. En Italia y España la lucha de Fernando Alonso y Ferrari por el título elevó las audiencias un 15% y un 11,5% respectivamente.
Para calcular todas estas cifras se incluyen a las personas que ven más de 15 minutos no consecutivos durante la temporada.
Audiencias de la F1 en los últimos años:
2008: 600 millones
2009: 520 millones
2010: 527 millones
2011: 515 millones
2012: 502 millones