Continúa el culebrón del repentino divorcio de Alba Carrillo y de Feliciano López que se ha hecho polémico públicamente desde que una despechada Alba haya ido vendiendo migajas de pan sobre el asunto.
Hemos conocido la peor imagen del tenista en boca de la modelo, también hemos visto la participación de la madre de Alba dando su opinión; hemos repasado las amantes de Feliciano. Incluso, hemos leído mensajes de Alba en sus redes que señalaban directamente a las mismas.
Pero, ahora, el divorcio da un nuevo e inesperado giro. Hasta la fecha, lo que conocíamos es que Alba abandonó la casa donde vivían ambos, porque está a nombre de Feliciano. Sin embargo, según ha revelado Kike Calleja, la familia del tenista no quiere hablar por un motivo: el régimen en bienes gananciales en el que se casaron.
Un giro inesperado de la historia que conocemos ahora y que le daría a Alba el 50% del dinero conseguido por Feliciano en los meses que han estado casados.
Kike Calleja explica lo siguiente: “Se casaron en régimen de bienes gananciales y esto ahora es un problema para Feliciano. Su familia no quería que fuera así y le ponen una cláusula a firmar a Alba que ella se niega, porque era que si se separaban tenía que abandonar la casa en máximo 48 horas. Feliciano decidió finalmente casarse en gananciales, pero siete meses después le dice a su mujer que tiene que firmar la separación de bienes. Y lo hizo. Alba puede reclamar el 50% de lo ganado ese tiempo”.
Y añadió: “Ahora la estrategia de Feliciano es pedir la nulidad matrimonial para que no valga ese matrimonio y así proteger su patrimonio. Además, ha contratado a un experto en gestión de patrimonios para que tase su fortuna y vea cómo puede no perder nada”.
El divorcio del tenista y de la modelo continuará dando mucho de qué hablar. De hecho, Alba acaba de fichar por el programa ‘Hable con ellas’, donde promete una discernida entrevista por el resto de sus compañeras, en este espacio de verano en Telecinco.