En este 2020 hemos podido viajar poco, seamos realistas. Y es que la pandemia no invita a muchas locuras en lo que a viajes se refiere. Aunque de momento podemos movernos, con muchas limitaciones, que no sucede como cuando tuvimos el confinamiento más duro, hoy vamos a proponerte un viaje sobre todo visual. E imaginativo.
El 14 de noviembre el pintor impresionista Claude Monet cumpliría 180 años. Para conmemorar esta fecha, Musement, plataforma de reservas de actividades turísticas y excursiones en más de 1.400 destinos, plantea una singular ruta a través de sus lienzos más famosos y los destinos que los inspiraron. ¿Preparado? El viaje tiene lugar por distintas localidades de Francia, Reino Unido, Italia y Países Bajos en las que el pintor residió en algún momento de su vida.
Monet solía pintar en el mismo lugar una y otra vez, en diferentes momentos del día, con distintas luces. También, en diferentes momentos del año, para así captar los cambios sobre los objetos y paisajes. Estas son algunas de las ciudades de este particular y colorido recorrido.
Le Havre (Francia). En esta ciudad del norte de Francia pasó parte de su infancia el pintor. Pero no fue el único que se sintió atraído por la luz de la desembocadura del estuario del Sena: también pintaron allí Pissarro, Sisley y Boudin.
Rouen (Francia). Monet pintó más de 30 lienzos de la catedral de Rouen. El pintor se sintió tan cautivado por el monumento que montó un taller justo enfrente.
Giverny (Francia): su obra más emblemática, Los Nenúfares, nos traslada a la casa de Giverny donde el artista vivió. En concreto, es el cuadro del estanque del jardín de agua repleto de nenúfares, juncos y lirios. Además del estanque, en el jardín está el puente japonés que Monet retrató en más de 18 lienzos. Tanto la casa como el jardín son una de las atracciones turísticas más populares en Francia.
París: Monet nació en París pero a los cinco años se mudó a Le Havre. Aún así, la capital francesa fue muy importante para él: en uno de sus cuadros plasmó el boulevard des Capucines, pero también pintó la estación de Saint-Lazare, el jardín de Tulleries, etc.
En Londres, Monet pintó más de cien cuadros
Londres (Inglaterra): el pintor residió hasta en tres ocasiones en Londres y durante sus estancias siempre buscó edificios que le inspirasen. El parlamento fue uno de ellos: en la ciudad inglesa el artista pintó más de cien cuadros que nos permiten ver los efectos de la niebla sobre el Big Ben, el Puente de Charing Cross, el Puente de Waterloo o el Támesis.
Venecia (Italia). Para disfrutar de la Venecia más mágica y colorida, basta con admirar los 37 lienzos que el artista pintó durante su único viaje a la ciudad italiana. Además del famoso canal, en sus obras inmortalizó otros lugares icónicos como el Palacio Ducal, la iglesia de Santa Maria della Salute o la basílica de San Giorgio Maggiore.
Bordighera (Italia). Monet viajó a la región de Liguria para intentar plasmar la luz del Mediterráneo. El artista necesitó casi tres meses para captar la magia de Bordighera, con su abundante vegetación y sus bellos jardines.
Ámsterdam (Países Bajos). Aparte de inmortalizar los tulipanes y los molinos de viento holandeses, Monet también tuvo tiempo para plasmar los canales de Ámsterdam en sus pintura como puede verse en el cuadro The Ziderkerk.
Sassenheim (Países Bajos). Además de retratar los campos de Sassenheim, el genio impresionista también reprodujo otro de los lugares más emblemáticos de los Países Bajos: Zaandam y sus pintorescos molinos de viento.