Aline Griffith, conocida como la condesa de Romanones, falleció el pasado lunes por la noche a los 94 años de edad y su capilla ardiente será en la Iglesia de San Francisco de Asís. Nacida en Nueva York el 22 de mayo de 1923, fue una de las figuras más importantes en la historia de España de la década de los 50 y 60 y una de las mujeres más relevantes de la jet set nacional e internacional.
Estudió periodismo, era una gran aficionada de los caballos, bailaba sevillanas y tangos y era una experta disparando en las monterías. Sus últimos años los vivió entre Madrid, -donde tenía una casa en El Viso-, en Extremadura –en su finca de Pascualete, cerca de Trujillo-, y Nueva York.
La condesa de Romanones era conocida por su inteligencia, elegancia y su estilizada silueta que siempre mantuvo aún después de dejar de ser modelo de alta costura. Alcanzó una gran popularidad en las pasarelas más importantes de Europa y Estados Unidos. Sin embargo, abandonó la profesión tras casarse con Luis Figueroa y Pérez de Guzmán, III conde de Romanones y Grande de España, con el que tuvo tres hijos: Álvaro, Luis y Miguel.
Fue espía de la CIA
Además de ser periodista, fue espía. Con 20 años ingresó en la Office of Strategic Services, la antesala de la CIA. Fue destinada a España como agente operativa asistente de cifrado para la OSS en Madrid durante la Segunda Guerra Mundial en 1943. En 1986, un año antes de enviudar, abandonó la CIA donde su nombre clave era Butch y Tigre.
Su trabajo aquí le permitió conocer en primera persona muchas historias, algunas jamás contadas. “Moriré con mis secretos”, señaló en alguna ocasión. Llegó a desvelar que durante años llevó en el bolso un revólver de nácar “por lo que pudiera suceder”.
Reconocida escritora de novelas de espías basadas en su historia
También fue una exitosa escritora. Su primera obra fue’ Historia de Pascualete’, que recoge las vivencias de los condes de Romanes en la finca extremeña de su propiedad. Alcanzó la popularidad como novelista en mayo de 1987 con su libro ‘La espía vestía de rojo’, en el que relató sus primeras peripecias como espía a partir de la Nochevieja de 1943, en el hotel Palace de Madrid. Terminó escribiendo una trilogía sobre su propia historia como espía y en 2010 publicó sus memorias, ‘El fin de una era’.
Se codeó con personajes muy importantes e influyentes como los duques de Windsor –Eduardo y Wallis Simpson – en su casa de París, Jacqueline Kennedy en la Casa Blanca y diferentes presidentes de gobierno y primeros ministros del mundo entero.
Estuvo a punto de que su vida se convirtiera en película pero no llegó a un acuerdo con los guionistas. “El productor quiere escenas subidas de tono y a mí no me interesan ese tipo de imágenes. Dije que de eso nada y no me volvieron a llamar”, declaró.
Una de sus joyas la tiene Corinna, la amiga del rey emérito
Además tenía en su poder uno de los joyeros aristocráticos más impactantes de la época, su collar convertible en diadema de diamantes y esmeraldas era una de las piezas más codiciadas. La vendió hace tres años a través de la casa de subastas Sotheby's de Ginebra. Se desconoce la compradora fue Corinna zu Sayn-Wittgenstein, la amiga entrañable del rey Juan Carlos, aunque también se especula con que pudo ser el propio emérito el que se lo regaló a Corinna.
La nieta de la condesa, Carla Figueroa Domecq, declaró al respecto: “Ese collar era parte de mi herencia, era mío. Lo llevó mi madre en forma de tiara cuando se casó. El rumor que corre es que el Rey Juan Carlos se lo compró a Corinna, pero vete a saber si es verdad. Creo que el dinero del collar lo ha invertido mi abuela en la fábrica de quesos de mis primos en Pascualete. Esos quesos los vendíamos en mi restaurante, La Querencia, cuando era socia y mis primos no fueron capaces de regalarme uno”, señaló dejando claro las desavenencias con la herencia.
Carla Figueroa Domecq, es hija de Álvaro de Figueroa y Griffith y de Lucila Domecq Williams, ex cuñada de Bertín Osborne, saltó también a la prensa por ser la novia de Willy, el hijo de Luis Bárcenas, con el que rompió “porque no estuvo a la altura”, según confesó tiempo después. Además la joven también posó desnuda para ‘Interviú’.
