Francisco Correa contrajo matrimonio en 1997 en segundas nupcias con María del Carmen Rodríguez Quijano en Marbella, por aquel entonces les casó, casualmente, la entonces alcaldesa Marisol Yagüe, condenada por el caso Malaya.
Años después de casarse con Correa, entró a trabajar como jefa de gabinete de Guillermo Ortega, el exalcalde de Majadahonda, imputado en el caso Gürtel. Fue funcionaria eventual de empleo entre el 2 de julio de 2001 y el 4 de febrero de 2005 en el Gabinete del regidor. Su nombre figura como consejera de Pasadena Viajes, Special Events, Construcciones Salamanca, Construcciones Roquiconsa y 25 Alfileres Torrent, destinado a tejidos al por mayor, según publica ‘El Economista’. La propia exmujer confesó que fue administradora de algunas de estas sociedades.
El vestido de ella en la boda de Aznar de casi 4.000 euros
Se rodearon de empresarios importantes y políticos de renombre hasta el punto de que ambos acudieron en septiembre de 2002 a la boda de Ana Aznar, la hija del expresidente de Gobierno, José María Aznar, en el monasterio de El Escorial.
Ella eligió para la ocasión un Caprile de casi 4.000 euros, un diseño que aparece en el sumario del caso Gürtel, al haber sido pagado con dinero público. Algo que chocó en seguida porque como primer pago la exmujer dio un anticipo de 1.800 euros y el sueldo que Correa cobraba como asesor técnico del Ayuntamiento de Majadahonda era poco más de 2.000 euros.
Se separan por las infidelidades de Correa
Sin embargo, en 2005 se separan por las continuas infidelidades de él aunque continuaron viviendo juntos hasta principios de 2009 cuando el juez Baltasar Garzón ordenó la detención de Correa, entre otros. En su domicilio de Pozuelo se encontraron unos 15 relojes de primera gama y muchas joyas de lujo.
En abril de 2014, la esposa del presunto cabecilla de la red Gürtel, presentó una demanda de divorcio en un juzgado de Pozuelo de Alarcón, en Madrid, en ella reclamaba a Correa una pensión de 4.500 euros mensuales para cubrir sus gastos y los de la hija que ambos tienen en común. La abogada de Correa en la causa es, curiosamente, la mujer del alcalde Ortega, Gema Matamoros.
Entre estos gastos estaría el pago del alquiler de la vivienda en la urbanización gaditana de Sotogrande, que asciende a 1.500 euros al mes, el colegio privado de la hija, que son más de 1.000 euros al mes, y la manutención de ambas.
La exmujer tiene una mala situación económica
La demanda de divorcio la presentó en el Juzgado de 1ª Instancia número 3 de Pozuelo, según han confirmado a El Confidencial fuentes judiciales. “Él era un mujeriego y su mujer se hartó de él. Hicieron vidas separadas hasta que lo metieron en la cárcel. Ahora ella está arruinada, y malvive con la ayuda de algunos amigos”, explicaron fuentes cercanas a su familia a ‘El Confidencial’ hace dos años ya y añadían que estuvo dos meses sin pagar el alquiler y “le embargaron la casa de su propiedad que compartía con Correa en La Finca [una lujosa urbanización de Pozuelo], las cuentas corrientes con el dinero que le había dejado su padre... Ni ella ni su familia tienen un duro”.
El padre de María del Carmen, imputado en el caso Malaya
La situación de la exmujer de Correa sigue siendo delicada y además está imputada también en el caso Gürtel. De hecho en las próximas semanas tendrá que sentarse en el banquillo a declarar. La Fiscalía solicita para ella 43 años de prisión y está acusada de diez delitos en la trama Gürtel. .
El padre de María del Carmen era el constructor Emilio Rodríguez Bugallo, que falleció en julio de 2008, fue uno de los principales imputados en el caso Malaya. Éste nunca vio con buenos ojos la relación de su hija con Correa, ya que le veía como una persona trepa e interesada sólo en su dinero y contactos.
Tres fincas embargadas y el papel de 'esposa ignorante'
En diciembre de 2015, se le notificó a la ex mujer de Francisco Correa que no podría disponer de sus tres fincas ubicadas en la ciudad malagueña de Marbella. El registro mercantil informó a la Audiencia Nacional que se hizo efectivo su embargo. Además, la imputada mantiene bloqueado sus fondos desde el año pasado para cubrir las indemnizaciones por responsabilidad civil que podrían imponérseles en un futuro juicio oral.
La estrategia de defensa de la exmujer de Correa siempre ha sido la de ser una esposa ignorante que desconocía los negocios que hacía su exmarido. Sin embargo la Audiencia Nacional le juzgará en las próximas semanas por los delitos de asociación ilícita, cohecho continuado, fraude a las administraciones públicas continuado, prevaricación continuada, malversación de caudales públicos, falsedad continuada, fraude y exacciones ilegales a las administraciones, blanqueo de capitales, tráfico de influencias y delitos contra la Hacienda Pública.