Fue el pasado 16 de octubre cuando el cantante Liam Payne, exintegrante de la banda inglesa One Direction, murió tras caerse del tercer piso de un hotel en Buenos Aires (Argentina). Una triste noticia que conmocionó a sus millones de fans e inició una investigación para aclarar lo sucedido la noche en la que, según el informe, el cantante murió a consecuencia de los “politraumatismos” y “una hemorragia interna y externa” provocadas por la caída.
Tras los rumores y los comentarios que apuntaban a los problemas de salud mental que atravesaba el artista, las autoridades descartaban la hipótesis del suicidio. Además, la autopsia descartaba lesiones autolesivas o la intervención física de terceras personas, concluyendo que Liam Payne no trató de protegerse en la caída, por lo que “pudo haberse precipitado en un estado de semi o total inconsciencia”. Una probabilidad que cobró fuerza tras desvelarse que esa noche, el artista había consumido alcohol y diversas drogas.
Ezequiel Pereyra, uno de los acusados de vender drogas a Liam Payne, se entrega a la policía
Poco después de la muerte de Liam Payne, varias personas eran imputadas en relación a este suceso, entre ellas Gilda Martin y Esteban Grassi, gerenta y empleado del hotel, acusados de homicidio involuntario, el mismo cargo que se le imputó a Roger Nores, amigo del cantante. Otros dos de los imputados fueron Braian Paiz y Ezequiel Pereyra, también trabajadores del hotel, a quienes se acusó de proveer drogas al fallecido.
El pasado viernes, la policía argentina detuvo a Paiz, de 24 años, en su domicilio al no presentarse ante las autoridades tras dictarse la orden de prisión preventiva en su contra. Y no ha sido hasta ahora cuando Pereyra se ha entregado a la policía tras la orden de detención de la jueza Laura Bruniard.
Así lo ha confirmado el diario ‘The Sun’, que señala que tras la muerte de Liam Payne, Ezequiel Pereyra fue despedido de su trabajo en el hotel y puesto bajo investigación por la policía. Según el medio, los fiscales aseguraron que el acusado fue el encargado de “venderle cocaína a Liam el 15 de octubre a las 3:35 a.m. y entre las 3:30 p.m. y las 4 p.m. el 16 de octubre”.
