La vuelta de Jesulín de Ubrique a los ruedos está dando mucho de qué hablar. Como no podía ser de otra manera, el torero ha estado acompañado por María José Campanario en este día tan especial, manteniéndose en un discreto segundo plano durante la jornada con el objetivo de no restar protagonismo a lo verdaderamente importante de ese día.
Así lo ha asegurado la propia María José Campanario, la cual ha asegurado que "hoy la atención era para ellos, y así debe seguir", siendo este el verdadero motivo por el que decidió quedarse en el hotel durante la corrida, desmintiendo así que no acudiese a la plaza por miedo.
De esta manera, tanto Jesús como María José se han mostrado de lo más felices y sonrientes en este día tan especial que ha transcurrido con éxito, sin ningún tipo de incidente sobre los ruedos y con la ovación de todo el público al mítico torero.
Con esta reaparición, María José Campanario se ha mostrado completamente recuperada de la fribomialgia que sufre, la cual le ha hecho vivir momentos muy delicados en los últimos años, acudiendo de manera habitual al hospital a causa de los fuertes dolores que le causaba.
Aunque el resto de familia no estuvo junto a Jesús en este día, los que sí que acudieron a la Plaza de Toros de Cuenca fueron los suegros del torero, padres de María José Campanario, los cuales se mostraron muy alegres de que la corrida de toros haya transcurrido tal y como estaba prevista y con el triunfo de Jesulín de Ubrique el cual logró cortar dos orejas.