Victoria López-Quesada y Borbón Dos-Sicilias y Enrique Moreno de la Cova celebraron su boda este sábado por la tarde en Madrid tras varios años de relación. La hija de Pedro López-Quesada, presidente del banco de inversión Citi Group en España e íntimo amigo del rey Felipe VI, y Cristina de Borbón-Dos Sicilias. La novia, de 27 años, es la ahijada del rey Felipe VI, por ello, el monarca no podía perderse la celebración, que era una de las más esperadas del año.
Sin embargo, llamó mucho la atención que el Rey, llegara acompañado por su hermana, la infanta Cristina, después de haber mantenido las distancias y no dejarse ver públicamente durante muchos años tras el caso Nóos y la separación de Iñaki Urdangarin. La hija del rey Juan Carlos I y la reina Sofía también es íntima de la madre de la novia, por lo que su asistencia estaba asegurada.
También asistieron a la boda, la reina Sofía, la infanta Elena y su hija, Victoria Federica de Marichalar, así como los hijos de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, Juan Valentín e Irene Urdangarin, que están viviendo junto a su hermano Miguel, en el palacio de La Zarzuela con su abuela, la reina Sofía. A pesar de la estrecha amistad que mantiene Felipe VI con el padre de la novia, no fue ni su mujer, la reina Letizia, que estaba en París en los Juegos Paralímpicos 2024, ni sus dos hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía. A la boda de Victoria López-Quesada y su marido, Enrique, hijo del ganadero sevillano Enrique Moreno de la Cova Maestre y la pintora Cristina Ybarra y Sainz de la Maza, también acudieron otros rostros famosos.
El rey Felipe VI y la infanta Cristina, entre los invitados a la boda de Victoria López-Quesada y Enrique Moreno de la Cova
La boda se celebró en la finca Soto Mozanaque, propiedad de Ioannes Osorio, duque de Albuquerque, ubicada en la localidad de Algente, a unos 20 minutos del centro de Madrid, para poder preservar la intimidad de los novios y sus invitados. Tanto la ceremonia religiosa como el banquete y la fiesta fueron en el interior de la finca.
Los invitados comenzaron a llegar en sus coches y en los autobuses pasadas las 17 horas de la tarde. Debido a la asistencia de miembros de la familia real, hubo un exhaustivo control a la entrada de la finca.
Uno de los primeros en llegar ha sido Pedro López-Quesada, el hermano pequeño de la novia y compañero de la princesa Leonor en la Escuela Naval de Marín, donde comenzó el pasado jueves 29 de agosto, donde la pudimos ver con el uniforme blando de guardiamarina, el mismo que lució el hermano de Victoria López-Quesada.
Como decíamos, el rey Felipe VI acudió como testigo, acompañado de su hermana, la infanta Cristina. El monarca llegó conduciendo su propio coche y con gafas de sol.
En otro vehículo, se pudo ver a la infanta Elena, sentada en la parte delantera, junto al conductor, y detrás, a su hija, Victoria Federica, amiga de la novia.
Los hermanos Urdangarin, Juan e Irene llegaron en otro coche en torno a las 19 horas. El hijo de la infanta Cristina era quien conducía el vehículo.
Íñigo Moreno de Arteaga y Teresa de Borbón-Dos Sicilias, abuelos de Teresa Urquijo, mujer de José Luis Martínez-Almeida, también estaban entre los invitados a la boda.
También se pudo ver a los condes de Osorno, Carlos Fitz-James y su mujer, Belén Corsini, que no quisieron perderse la celebración.
El duque de Huéscar, Fernando Fitz-James, también asistió y fue el encargado de llevar al sacerdote a la finca. Su mujer, Sofía Palazuelo tampoco quiso perderse esta boda tan especial que ha reunido a la familia real y a la aristocracia.
Otros invitados que ni quisieron perderse la boda de Victoria López-Quesada y Enrique Moreno de la Cova fueron Lucía Martín Alcalde, hermana y socia de la diseñadora nupcial Inés Martín Alcalde, que asistió con su marido, Santiago Benjumea; Carla Royo-Villanova y su marido, el príncipe Kubrat de Bulgaria.