Tan solo ensombrecida por la polémica canción de Shakira contra Piqué, la reconciliación de Tamara Falcó e Íñigo Onieva es, sin duda, una de las noticias más sorprendentes del inicio de año. Fue hace unas semanas cuando, tras días de rumores, se confirmó que la marquesa de Griñón había perdonado al empresario tras la sonada deslealtad. Una deslealtad que dinamitó tanto su relación como su compromiso.
Y es que, apenas unas horas antes hacerse públicas las imágenes de Onieva besándose con otra mujer durante un festival en el desierto de Nevada, la hija de Isabel Preysler había aceptado un espectacular anillo de compromiso que orgullosa lucía en su mano. Un anillo que aseguró haber devuelto tras su ruptura, y que tras la reconciliación ha vuelto a cobrar protagonismo.
Así, la pasada semana, Tamara Falcó e Íñigo Onieva celebraban de nuevo su amor con un inesperado viaje al Polo Norte. Una romántica escapada que compartían a través de sus redes sociales, donde comenzaron a circular las incógnitas sobre su compromiso y su admirado anillo.
Los rumores sobre el anillo de compromiso de Tamara Falcó
Fue el 22 de septiembre cuando una emocionada Tamara Falcó anunciaba su compromiso con Íñigo Onieva. Un compromiso sellado con un increíble anillo valorado en 14.500 euros que tras su ruptura la marquesa decidió dejar encima de la mesa que compartían, tal y como ella misma aseguró. Así, hace unos días, muchos creyeron volver a ver la bonita pieza en el dedo anular de la colaboradora de ‘El Hormiguero’. Una historia que corrió como la espuma y que confirmaba que el compromiso entre la pareja continúa.
Y aunque los planes de boda siguen en pie, tal y como aseguró la propia Tamara Falcó en su programa (“Tenemos fecha, nos casaremos el 17 de junio. Si todo va bien, estamos súper contentos, nuestras familias felices y ojalá comamos perdices”), parece que no hay anillo de compromiso.
Así lo ha podido confirmar ‘Diez Minutos’ que asegura haberse puesto en contacto con la propia Tamara Falcó tras los rumores. “Nos ha confirmado que no es así: luce sus manos sin ningún tipo de sortija” desvela la revista, que además publica una imagen que la propia marquesa de Griñón les ha enviado demostrando que en su mano no hay anillo alguno.
Al menos por el momento, y es que, tal y como han asegurado diferentes fuentes, Íñigo Onieva tiene planeado comprar otra pieza distinta .Y es que, según la mencionada revista, “se trata de una segunda oportunidad, de un reseteo de la relación que requiere que este compromiso sea totalmente diferente, por lo que se merece un anillo diferente. Así, todo parece indicar que la marquesa de Griñón no volverá a lucir la joya que Onieva le regaló en su día, sino que le pedirá nuevas muestras de su compromiso”.
Tal y como apuntaron desde ‘El Programa de Ana Rosa’ es probable que, en esta ocasión, sean varias las muestras de amor que luzca Tamara Falcó en sus dedos, un anillo de compromiso, otro de pedida y la futura alianza de matrimonio. Eso sí, según apuntó la periodista Marisa Martín-Blázquez, Íñigo Onieva ya tendría el anillo para su chica: “El anillo, él ha ido a comprar uno nuevo, se ha asesorado, es uno mucho más clásico que lo que había hecho al principio”.
Y es que el anillo inicial era de todo menos clásico. Un anillo de lo más original, de oro blanco tres diamantes con forma de pera, valorado en 14.500 euros, y cuyo destino ha dado mucho de qué hablar.
Así, hace unos días, la periodista Beatriz Cortázar desvelaba en ‘Es la mañana de Federico’: “Había otro anillo pedido y encargado que llegaba el pasado mes de noviembre. Ese de verano era un prototipo y en noviembre llegaba el definitivo, que valía en torno a 50.000 euros. Por eso cuando Tamara le pidió que le devolviera el anillo que lo quería llevar a una subasta benéfica para que su historia de amor por lo menos tuviera un buen final, Íñigo le dijo “no, porque el anillo yo ya no lo tengo, porque lo he devuelto, era un prototipo”.
De esta manera, Tamara Falcó estaría esperando una nueva pieza. Un anillo que por el momento parece que aún no tiene ya que, según apuntan varias fuentes, hace unas horas, la feliz pareja disfrutaba de una cena en el restaurante Ugo Chan de Madrid junto a la Natalia Onieva, tía del empresario, de donde salió la marquesa mostrando que, por el momento, sus dedos continúan sin sortija alguna.