En el mes en que el Gobierno presentó en sociedad la reforma laboral, el mercado de trabajo ha respondido con 112.269 personas más inscritas en los servicios públicos de empleo, el antiguo INEM. Según los datos hechos públicos en la mañana del viernes por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, el número total de parados registrados en los servicios autonómicos de empleo ha llegado hasta los 4,7 millones en febrero, aunque los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que realiza el INE dan una cifra muy superior a los cinco millones, ya que parte de estos desempleados no están dados de alta en el antiguo INEM.
Febrero es el séptimo mes seguido que sube el paro, que aumenta sin cesar desde julio de 2011
De esta forma, 2012 empeora con mucho los datos de febrero del año pasado, mes en que el paro subió en 68.260 personas y llegó a los 4,3 millones. Es decir, en un año han aumentado los parados registrados en 400.000. Febrero de 2012 se convierte así en el segundo peor febrero desde que comenzó la crisis, sólo superado en cifras por los 154.058 parados de febrero de 2009.
En lo que llevamos de año, 289.739 personas se han inscrito a los servicios públicos de empleo autonómicos, aunque hay que tener en cuenta que también muchas miles de personas han sido contratadas y por tanto han abandonado las listas. La subida en febrero es la séptima mensual seguida, pues el paro lleva creciendo en España desde agosto, con algunos hitos como octubre, donde el paro aumentó en 134.182 personas, o el citado mes de enero donde subió en 177.470.
Solamente en el mes de enero, el Estado pagó 2.700 millones en seguros de desempleo, e igualmente la Seguridad Social ha perdido medio millón de cotizantes en un año.
Andalucía, líder absoluta
En el sector servicios es donde se está produciendo el aumento más dramático del desempleo. Respecto a las regiones, Andalucía es la líder absoluta del desempleo en España, lo es en términos absolutos con 1,2 millones de parados y también lo fue en febrero, con 36.404 parados más. Sólo queda un mes para las elecciones andaluzas y la situación del mercado de trabajo andaluz, tradicionalmente débil, lo es más si cabe.
