La ley lo permite y las circunstancias obligan: Economía se está embolsando los fondos de sociedades abandonadas. Se trata de sociedades que no han registrado ninguna actividad en el plazo de veinte años y que conservan sus fondos fundacionales en la Caja General de Depósitos, el órgano administrativo en el que se inscribieron.
"Es imposible saber cuántos fondos son”, aseguran los técnicos de economía que hablan de “migajas financieras” pero que están siendo expurgadas para aportar esos fondos a la caja del Estado.
"Son migajas económicas" pero se expurgan para engordar la caja del Estado
El B.O.E. ha publicado en las últimas semanas avisos para ingresarse esos fondos en el plazo de 30 días. Son “valores y efectivo” que llevan años inactivos y ante los que Economía argumenta que la falta de movimiento implica falta de derechos de propiedad. La última lista se publicó el pasado miércoles, 21 de marzo.
Economía está dando un mes a esas empresas fantasma para reclamar sus fondos o se ingresará esas cuantías blandiendo el artículo 18.1 de la Ley 33/2003 de Patrimonio de las Administraciones Públicas. Entre las empresas inscritas hay Ayuntamientos como el de Llers, en Girona, o filiales de empresas extranjeras como Sea Food Import o Degussa Ibérica, que han depositado decenas de miles de euros para su fundación pero que no disponen de esos fondos desde 1991.
El ministerio está revisando también “saldos de cuentas corrientes y libretas de ahorros” inactivas desde hace años que podrían ser susceptibles de engrosar las arcas públicas con la filosofía de que “grano a grano se hace granero”, afirman los técnicos consultados.