Abanca ha sufrido en el mismo día la caída de sus sistemas informáticos y la marcha atrás de una posible operación corporativa, tras decidir no lanzar una OPA sobre Liberbank.
Lo cajeros de la entidad y el servicio online de Juan Carlos Escotet se vinieron abajo sobre las 12 del mediodía sin ningún motivo aparente. Fuentes del banco explicaron a este medio que se trata de un problema informático que no tiene que ver con ningún tipo de migración tecnológica. "Los ingenieros están trabajando lo más rápido posible para solucionar el problema y cuando esté resuelto se buscará el motivo", han añadido las mismas fuentes.
Este problema informático ha generado mucho revuelo entre sus clientes en Twitter, aunque el banco ha sabido resolver las diferentes cuestiones a través de la misma red social y ha informado en todo momento de la actualización de los procesos.
En estos momentos nuestros servicios a distancia no están disponibles. Estamos trabajando para solucionar el problema. Lamentamos mucho las molestias.
— ABANCA (@SomosABANCA) February 26, 2019
La caída ha coincidido con la decisión del consejo de administración de no lanzar una OPA sobre Liberbank, tras la presión realizada por la CNMV al pedirle una oferta oficial en 10 días hábiles. Este martes, el presidente del regulador, Sebastián Albella, aseguró que su posición no era contraria a que Liberbank le abriera los libros a Abanca, pero agregó que la oferta se tenía que haber hecho siguiendo estrictamente el real decreto de opas.
Abanca, en un hecho relevante remitido en la mañana del martes, se defendía asegurando que el banco había obrado con la mayor rigurosidad posible y que sólo había respondido con transparencia a las informaciones que se habían filtrado a la prensa.
La oferta
El banco gallego estaba dispuesto a pagar 1.700 millones de euros por la entidad cántabra, lo que demuestra que Escotet tiene 'apetito' y que busca activamente oportunidades en el mercado.
El pasado viernes 22 de febrero, el banco gallego aseguraba que estaba en conversaciones con los accionistas de Liberbank para lanzar una OPA sobre la entidad asturiana. Horas después, Abanca lanzaba ya su oferta: 1.700 millones de euros por el total de Liberbank, a un precio de 0,56 euros por acción, tomando como referencia la cotización del cierre del 21 de febrero de este año.
CNMV y Liberbank desconfiaban de la entidad presidida por Juan Carlos Escotet y le exigieron ayer una oferta oficial, además de que cumpliese con todos los requisitos de la ley de OPA para sentarse a negociar. El regulador le daba diez días, ni uno más, dejando a Abanca con un margen de una semana para analizar los números de Liberbank.