ACS ha sufrido una caída del 38% en su beneficio neto durante los primeros nueve meses. La empresa que preside Florentino Pérez ha ganado 477 millones de euros, frente a los 769 millones del mismo período de 2019, castigado por la evolución de Abertis, cuyo tráfico se ha visto fuertemente afectado por las medidas de confinamiento en la mayoría de los países donde opera.
Sin considerar el impacto de Abertis, el beneficio neto hubiera disminuido un 15,7% entre enero y septiembre, un periodo marcado por la pandemia de coronavirus, según las cuentas remitidas por el grupo que preside Florentino Pérez a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Por su parte, la cifra de negocio de ACS sumó 27.204 millones de euros, el 5,5 % menos por las medidas sanitarias durante la pandemia, mientras que el resultado bruto de explotación (ebitda) se redujo un 17,1 % impactado por Abertis y contabilizó 1.994 millones.
La cartera a septiembre de 2020 de la constructora se sitúa en 73.494 millones de euros, un 5,3% menor que el año pasado debido al impacto del tipo de cambio, principalmente del dólar americano que se ha devaluado un 7,8%; ajustado por el efecto divisa la cartera total se mantiene prácticamente estable respecto al año anterior. "El impacto de la pandemia ha afectado a la actividad de contratación retrasando las adjudicaciones de nuevos proyectos", explica la compañía.
El beneficio bruto de explotación (EBITDA) se ha visto afectado también por el impacto en la contribución de Abertis y se ha situado en 1.994 millones de euros, un 17% menos. Sin este efecto, el EBITDA alcanza los 2.004 millones, reduciéndose un 7,4% en el periodo.
Impacto de la covid-19
La filial más afectada del Grupo ACS ha sido Abertis. La compañía se ha visto sustancialmente afectada por las medidas de confinamiento y restricción de la movilidad decretadas en la mayoría de los países donde opera, que han provocado drásticas caídas en el tráfico medio diario desde la segunda quincena de marzo de 2020, afectando significativamente a sus resultados.
"A medida que estas restricciones se han ido levantando, se ha experimentado una recuperación del tráfico durante el tercer trimestre del año, compensando, en parte, el fuerte descenso de los resultados operativos del primer semestre", explica en su comunicado.
Por su parte, en Clece, durante el estado de alarma, se paralizaron o redujeron temporalmente las actividades de limpieza y mantenimiento de aquellas infraestructuras sociales que cesaron su actividad como centros escolares o de ocio, instalaciones no esenciales y el transporte aéreo. Sin embargo, se reforzaron las actividades en centros hospitalarios y dependencias públicas.