Volkswagen ha adjudicado a la planta navarra de Landaben la producción de un nuevo modelo del que todavía no se sabe el nombre pero sí que será un SUV con diseño coupé basado en el T-Cross. Será, así, el tercer modelo que se producirá en la fábrica navarra del grupo alemán, que en poco más de dos años habrá pasado de un producir un solo modelo a tres. Al Polo que llevan fabricando desde hace más de 30 años se unió el año pasado el T-Cross y se sumará a partir del que viene el nuevo SUV de estilo coupé, la apuesta deportiva de la marca para el segmento que más crece en los últimos años y que se espera siga haciéndolo en los próximos.
Una adjudicación muy trabajada por parte de los responsables de Volkswagen en España en estrecha colaboración con los representantes de los trabajadores, con un acuerdo firmado el pasado verano entre la dirección de VW Navarra y los sindicatos UGT, CCOO y ELA sobre productividad y modificaciones de condiciones de trabajo. Desde la dirección central en Alemania se consideró definitivo este acuerdo a la hora de valorar la nueva carga de trabajo a la fábrica de Landaben.
Porque si ya la adjudicación del segundo modelo el año pasado, el T-Cross, supuso un espaldarazo a la planta navarra, con este tercer modelo se garantiza además mayor empleo, unos 500 nuevos puestos de trabajo directos que se sumarán a los alrededor de 5.000 actuales, así como una inyección millonaria en las empresas locales que abastecen a Landaben.
Este tercer modelo que se comenzará a fabricar en Volkswagen Navarra en el segundo semestre de 2021 será un CUV (coupé urban vehicle) de aspecto deportivo, ha afirmado este jueves el director de la planta navarra, Emilio Sáenz, que ha participado como ponente en el XXIV Congreso de calidad en la automoción 4.0 que se celebra en Pamplona. Sáenz ha asegurado que este nuevo modelo, que comparte plataforma MBQ con el Polo y el T-Cross, va a ser "un boom" en el mercado.
Casi 1.500 coches diarios
El director de la planta ha destacado la importancia de la implicación de Volkswagen Navarra en este lanzamiento y, así, ha declarado que especialistas de la fábrica han trabajado desde el primer momento con los diseñadores de Brasil y Alemania para que el nuevo modelo se ajuste bien a sus líneas de montaje y las piezas "sean fácilmente montables". Actualmente, Volkswagen Navarra fabrica 1.450 coches diarios y ya produce ya más unidades del segundo modelo, el T-Cross, que del primero, el Polo, en una proporción aproximada del 55-45%.
Antes de julio del próximo año, ha añadido, se llevarán a cabo algunos cambios en el Polo actual y, a mitad de mes, en unas fechas que no ha precisado, se hará el lanzamiento del tercer modelo. Sáenz ha explicado que, con el lanzamiento de la última versión del Polo, en el proceso de adaptación se perdió una producción de unos 40.000 coches, pero, con la introducción del T-Cross, no se perdió ninguno. Con cada T-Cross que salía de las líneas de montaje, se dejaba de fabricar un Polo, ha señalado Sáenz, quien ha confiado en que ocurra lo mismo con el tercer modelo.
El directivo de Volkswagen ha puesto de relieve la incertidumbre que vive el sector de la automoción en todo el mundo y ha reconocido saber dónde están hoy en Navarra y es en una planta que fabrica más de 300.000 unidades anuales, con unos 5.000 empleados que producen dos modelos con motor de combustión, tanto de gasolina como diésel. Se trata, ha precisado, de coches que contaminan diez veces menos que hace seis o siete años.
En todo caso, ha apuntado, es necesario que "la rueda de la industria siga girando" y en ese sentido ha subrayado que "el futuro es eléctrico, para Volkswagen está más que claro", aunque el eléctrico "popularizado para todos" puede tardar, ha dicho, entre 8 y 10 años, dependiendo además de la situación de cada país.
Tras resaltar que, en un entorno del sector muy complicado, Volkswagen Navarra tiene el futuro garantizado para 7 u 8 años, Sáenz ha insistido en que la apuesta es la electrificación, pero "hay que dejarnos respirar" e "ir poco a poco y viendo el panorama".
"Todos vemos un coche eléctrico en el futuro", ha señalado Sáenz a los representantes de la industria automovilística española, tanto fabricantes como proveedores, a los que ha indicado que es necesario favorecer el consumo de los coches que se producen actualmente para que los consumidores no retrasen las decisiones de compra y las empresas tengan "una palanca para el futuro".
Sáenz ha defendido el concepto de "fábrica mixta" en el grupo Volkswagen, con plantas capaces de producir coches de combustión y eléctricos. Para ello, ha dicho, la factoría pamplonesa debe irse preparando, porque "si no hacemos esto, el futuro sí que estará en peligro a partir de 2020-2028". Un futuro en el que también contempla acoger algún día la zona de testeo para vehículos autónomos de todo el grupo automovilístico alemán, el próximo gran reto de la fábrica navarra.