Donald Trump era expulsado de Twitter tras el asalto al Capitolio por parte de su legión de seguidores. El 45 presidente de los Estados Unidos utilizó su perfil en la red social del pajarito para mantenerse de perfil. En un primer momento pidió calma a los asaltantes pero no les instó a abandonar el edificio oficial.
Pasadas las horas, y después de que Twitter calificara como falsos algunos de sus tuits, finalmente pidió a sus seguidores que dejasen libre el Capitolio. El comportamiento de la red social ha acabado por colmar la paciencia de Twitter, que eliminó definiticamente su perfil oficial, lo que ha generado una gran controversia. Hay quien no lo ve justo.
Ha sido el principio de una 'guerra' en redes sociales. Una parte de sus seguidores comenzaron a migrar de Twitter a Parler, espacio que se autoproclama como un reducto de libertad de expresión alternativo a otras redes sociales como Facebook o Twitter (ver cómo funciona Parler).
En paralelo, Apple y Google decidían eliminar la posibilidad de descargarse la aplicación desde sus respectivas tiendas. Amazon acaba de darle la puntilla. Su división de servicios en la nube, Amazon Web Services, ha decidido retirarla de sus servidores.
Los intentos por entrar en la plataforma arrojan el siguiente resultado:
Se trata de una acción que da la puntilla a una red social que declaraba tener casi 3 millones de seguidores el pasado mes de julio. Hoy a buen seguro la cifra será considerablemente más alta, pero lo cierto es que la expulsión de Amazon Web Services y de las tiendas de apps complicará mucho su supervivencia.