Las acciones de los bancos están teniendo un comportamiento extraordinario en el año 2024, muy por encima del que registra el principal indicador de la bolsa española. El Ibex 35 acumula una revalorización en el año del 17%, la misma, aproximadamente, que BBVA. Los otros cinco bancos que forman parte del Ibex ganan hasta el pasado viernes entre un 23% del Santander y el 73% de Banco Sabadell. Los títulos de Caixabank han subido un 56%; los de Bankinter, un 31%, y los de Unicaja Banco, un 26%.
Esta revalorización de las acciones bancarias no ha sido paulatina, sino que a lo largo de los casi diez meses transcurridos del año se han producido picos y valles en función de los rumores sobre el giro que podría dar el Banco Central Europeo en su política monetaria o alentadas por nuevos episodios de consolidación en el sector bancario español y europeo que todavía no han fructificado.
Hay un hecho claro: desde que el consejo de gobierno del BCE decidió iniciar una política de tipos de interés más bajos, las acciones bancarias han ido perdiendo parte de su valor. Con los datos que diariamente ofrece Bolsas y Mercados Españoles (BME), las acciones de los bancos españoles que cotizan en Bolsa han bajado entre un 5,7% y un 19,5%, con la única excepción de Caixabank que se ha revalorizado un 1,3% desde que el BCE realizara en junio su primera bajada de los tipos de interés este año.
Los títulos de Banco Santander han perdido desde principios de junio, una semana antes de que el BCE acordará bajar el precio oficial del dinero del 4,50% al 4,25%, alrededor de un 5,7%; los de BBVA, un 7,5%; los de Bankinter, un 9,95%; los de Banco Sabadell, un 5,98%, y los de Unicaja Banco, un 19,5%.
Los tipos de interés están íntimamente vinculados a la rentabilidad bancaria
Los tipos de interés altos permiten a la banca aumentar el rendimiento de sus inversiones, pero, sobre todo, ganar más dinero al ampliarse el diferencial entre lo que cobran a sus clientes por el dinero que les prestan y lo que pagan a estos mismos clientes por el dinero que guardan en cuentas corrientes y depósitos a plazo. Cuanto más bajo es el precio oficial del dinero el diferencial se estrecha y los beneficios se reducen.
Basta con analizar la evolución reciente de los tipos sintéticos de interés de las nuevas operaciones que elabora el Banco de España. Estos tipos se calculan como una media de los tipos de las operaciones de préstamos, créditos, depósitos a plazo y depósitos a la vista de hogares y sociedades no financieras de acuerdo con la ponderación de los saldos vivos de cada una de las categorías.
En la actualidad, con los datos de agosto, los últimos publicados por el banco central español, el tipo TAE medio de los préstamos y créditos es del 5,09%, mientras el de los depósitos es del 0,72%, lo que permite un diferencial de 4,37 puntos porcentuales. Téngase en cuenta que en agosto el BCE solo había realizado una bajada de tipos, la del mes de junio.
En septiembre de 2023, con el precio oficial del dinero en el 4,50%, el diferencial entre los tipos del activos (préstamos y créditos) y los del pasivo (ahorro) rozaba los cinco puntos porcentuales: 5,47%, frente al 0,53. Sin embargo en noviembre de 2021, con los tipos de interés del BCE en el 0%, el diferencial fue de apenas 1,94 puntos porcentuales: 1,96% para los créditos y sólo un 0,02% para los ahorros. Esta situación de diferenciales más estrechos se mantuvo entre los años 2016 y 2022, los años en los que el dinero estuvo regalado.
Desde agosto, el BCE ha realizado otras dos bajadas más del precio oficial del dinero y ha cambiado la referencia que guía su política monetaria al tipo de interés de la facilidad de depósito. Con las tres operaciones realizadas este año, el BCE ha bajado los tipos desde el 4,5% vigente hasta junio, al actual 3,25%, en vigor desde mediados de este mes.
Estas medidas se han dejado sentir en las cotizaciones bancarias, sobre todo si la comparación se realiza desde los máximos alcanzados por cada entidad. Santander llegó a cotizar en mayo a 4,868 euros y ahora lo hace a 4,57 euros, lo que supone una caída del 6,06%. En el caso de BBVA la pérdida es mayor, un 19,55%, desde sus máximos de abril. Unicaja ha sido la más afectada, con una caída desde su nivel más alto del 21,74%. Sabadell, Bankinter y Caixabank se han dejado desde sus cotizaciones máximas de este año un 11,54%, 11,04% y 4,83%, respectivamente.