El periodo de adscripción voluntaria al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de Santander España se inicia este miércoles, 13 de diciembre, y permanecerá abierto hasta el próximo 31 de enero.
Así, los empleados de la entidad presidida por Ana Botín, incluidos los procedentes de Popular, podrán acogerse al expediente antes de febrero del próximo año, aunque el banco comenzará a dar respuesta a las solicitudes a partir del 10 de enero.
Por el momento, la red comercial de ambas entidades no se ve afectada en el marco del ERE, pues su integración no se prevé hasta el año 2019, por lo que los empleados de la red comercial de Santander y Popular no pueden adherirse al acuerdo.
La dirección de la entidad y los sindicatos CCOO, UGT, FITC y STS, representantes del 85,54% de la mesa negociadora, firmaron el martes el ERE que Santander ha puesto en marcha en el marco de la integración de Popular, entidad que adquirió el pasado junio.
El proceso implicará la salida de 1.100 empleados mediante prejubilaciones y bajas incentivadas, una cifra un 30% inferior a la propuesta cuando comenzaron las negociaciones, hace más de un mes. El ajuste de empleo supone una reducción del 3,1% en la plantilla conjunta de Santander España y Banco Popular, que suman unos 35.000 trabajadores.
En concreto, la entidad ofrece salidas con el 80% del salario a los empleados que superen los 50 años de edad, así como diversas primas en función de la antigüedad de cada trabajador. Para los menores de 50 años, el banco ofrece 40 días por año con un límite de 24 mensualidades más dos primas en función de los años que lleven trabajando en la entidad.
El proceso de integración también contempla la recolocación de 575 empleados de los servicios centrales de Popular en otras empresas del Grupo Santander, principalmente en el área de Tecnología, y el acoplamiento de otros 100 trabajadores en la red comercial de ambas entidades. Por su parte, 22 empleados de Santander España serán recolocados en otras empresas del grupo.
De este modo, sumando salidas y recolocaciones, el proceso de integración supondrá una reducción de plantilla del 25%, aproximadamente, en los servicios centrales de Santander y Popular tras la adquisición de esta última al precio simbólico de un euro.
Además, la consultora Lee Hecht Harrison, contratada por Santander en el marco del proceso, se ha comprometido a recolocar al 80% de los trabajadores que salgan de la entidad y deseen seguir trabajando en el plazo de 12 meses, tanto en España como en el extranjero, según el deseo de los interesados.
En un comunicado dirigido a su plantilla, al que ha tenido acceso Europa Press, el consejero delegado de Santander España, Rami Aboukhair, manifiesta su compromiso de "garantizar que el proceso se está realizando y se realizará de forma ejemplar, con absoluta transparencia y aplicando, en todos los casos, criterios de meritocracia".