Primera cifras por el retraso en el pago por los depósitos en España. Las entidades financieras pagaron 750 millones menos al mes de media que sus competidores en Francia y Alemania durante la segunda mitad de 2022, cuando el Banco Central Europeo (BCE) cambió el paso y subió los tipos de interés en 250 puntos básicos (de julio a diciembre). Santander, BBVA y CaixaBank controlan alrededor del 60% del mercado de depósitos y se resisten a entrar en una guerra del pasivo pese a las tensiones de liquidez por la caída del Silicon Valley Bank (SVB).

En un análisis publicado en la Revista de Estabilidad Financiera del Banco de España, firmado por varios miembros de la Dirección General de Estabilidad Financiera, Regulación y Resolución, se analizan las diferencias entre las principales potencias europeas en el traslado del euribor al coste de los depósitos.

El principal índice al que están referenciadas las hipotecas cerró el 3% en 2022, su nivel más alto desde la burbuja inmobiliaria, pero sólo se trasladó un 17% de la subida al interés de los depósitos a plazo. En el caso de países como Países Bajos y Alemania superó el 40%.

"Los bancos tienen preparada una oferta de depósitos para lanzar en menos de 48 horas si Santander, BBVA ó CaixaBank mueven ficha para captar el pasivo

La inapetencia de los grandes bancos por el pasivo ha provocado una mejora paulatina en las cuentas, que ahora desde el Banco de España se certifica en cifras. El coste de los depósitos para los bancos españoles ascendió a 116 millones mensuales en España justo después de que el BCE arrancara su cruzada contra la inflación y hasta finales de 2022, según el citado artículo firmado por Alejandro Ferrer, Gergely Ganics, Ana Molina and José María Serena, miembros de la Dirección General de Estabilidad Financiera del banco central.

Se trata de una cifra muy inferior a lo que pagaron las entidades en Alemania (600 millones al mes ) y, sobre todo, respecto a Francia (1.140 millones al mes). En el país galo, los bancos están obligados por ley a trasladar automáticamente en su política comercial las decisiones de política monetaria. La banca española también está a la cola de Italia y Países Bajos, que remuneraron el producto tradicional de ahorro con 250 millones al mes.

El interés no repunta, a la espera de la gran banca

Con los grandes bancos sin depósitos en sus escaparates comerciales, el interés que abonan las entidades españolas por este producto a un plazo de hasta un año alcanza el 1,36% a marzo, según las últimas estadísticas del BCE. Compara con una media del 2,09% en la zona euro. En Alemania se remunera el mismo producto con un 2,19% y en Francia, con un 2,83%.

No es la primera vez que el Banco de España y el BCE han puesto en la diana a los bancos españoles por los depósitos. Se ha constatado que se retrasa el pago para mejorar los ingresos típicos, al beneficiarse del aumento histórico del precio del dinero en la revisión de las cuotas hipotecarias. Incluso la propia presidenta del Eurobanco, Christine Lagarde, alentó a la fuga de clientes para obligar a las entidades a pagar, lo que soliviantó a los banqueros españoles.

Las entidades alejan una guerra del pasivo por el exceso de liquidez. Un argumento que corroboran desde el Banco de España. Los firmantes del artículo en la Revista de Estabilidad Financiera consideran, de hecho, que una disminución de la financiación obtenida por los bancos españoles del Eurosistema tendría un impacto significativo en el traslado del euribor al interés de los depósitos. A cierre de 2021, se estima un exceso del 9,8% en el ratio de liquidez, que de desplomarse a cero reduciría la brecha con el euribor en un 85%.

Menos bancos para competir

Pero desde el departamento de Estabilidad Financiera del Banco de España además se apunta a un motivo más para explicar el retraso: los altos índices de concentración bancaria en España. De hecho, el mapa bancario ha pasado de estar formado por 45 entidades antes de la crisis de 2008 a alrededor una decena. Tras la fusión de Bankia con CaixaBank, tres bancos (el propio CaixaBank, Santander y BBVA) concentran más del 60% de la cuota de crédito y depósitos.

"Si hubiera más bancos significativos, los grandes ya estaría pagando por el depósitos y situaría el foco comercial y estratégico en el pasivo", afirma un directivo de uno de los bancos más importantes. Sin ir más lejos, en el seno de algunas entidades se reconoce que tienen preparada la oferta de depósitos para activarla en menos de 48 horas si cualquiera de los tres grandes bancos mueve ficha. Y también se reconoce en privado que está afectando el impuestazo, cuya factura de 2023 se ha asumido de golpe en las cuentas del primer trimestre.