Apuesta de uno de los grandes fondos de Silicon Valley por España. El private equity Silver Lake rastrea el sector financiero en busca de compañías especializadas en la externalización de servicios bancarios. El objetivo es engordar el Grupo BC, que compró a finales de 2021, según fuentes financieras.
Silver Lake, con sede en California, es uno de los mayores inversores del mundo en tecnología, aunque también ha tomado participaciones en equipos de fútbol de renombre, como el Manchester City. Tiene más de 80.000 millones de euros en activos bajo gestión y una plantilla cercana al medio millón de personas.
El plan del fondo de EEUU es crecer con compras de pequeñas compañías especializadas y de filiales de bancos"
El gigante de Silicon Valley adquirió el año pasado la firma de servicios bancarios e inmobiliarios Grupo BC. No trascendió el precio por hacerse por el 100% que tenía el fondo L-Gam, participado por la Casa del Príncipe de Liechtenstein, aunque fuentes financieras estiman que desembolsó entre 500 y 700 millones de euros. El plan del fondo de Estados Unidos es crecer con compras de compañías especializadas en el asesoramiento o en servicios para externalizar algunas actividades de los bancos.
De hecho, Grupo BC ha crecido en los últimos años a base de adquisiciones, como la de Lexer, una plataforma de defensa contra pleitos para bancos. Esta compañía precisamente también había ganado tamaño en los últimos años a través de varias compras de empresas más pequeñas cuando estaba controlada por el fondo español Magnum.
Intento por hacerse con una filial de Unicaja
Este será el objetivo prioritario de Silver Lake con Grupo BC, que quiere aprovechar su mayor escala para ir sumando pequeñas compañías que prestan servicios a las entidades financieras. Pero tampoco se descarta que el fondo de Silicon Valley se lance a por filiales de bancos en las que concentran actividades que no se consideran estratégicas.
Es el caso de ATG (Andaluza de Tramitaciones y Gestiones), la filial de gestión hipotecaria de Unicaja, por la que se interesó Grupo BC junto a Indra, Cerberus y el fondo británico Anacap hace unos años. El banco andaluz activó la venta de ATG para acelerar en la reducción de costes tras romper el intento de fusión de Liberbank en 2019, aunque la suspendió tras la irrupción del Covid.
Pero el cambio de rumbo del BCE en su política monetaria puede jugar en contra de los planes de Silver Lake. Las entidades españolas están mejorando sus niveles de eficiencia, que mide los costes sobre ingresos, y la previsión es que las necesidades de ahorro de costes sean menores por la subida de tipos de interés en Europa, que empezará este mes y que se podría acelerar en los próximos meses para tratar de atajar la escalada de la inflación.
Grupo BC centra su negocio en prestar servicios hipotecarios a los principales bancos españoles, a los que facilita la gestión de los trámites necesarios para conceder una hipoteca. También tiene un área dedicada a los préstamos personales y la tramitación de pólizas de seguros, así como a la gestión de mantenimiento de los inmuebles de las entidades. Antes de la entrada de Silver Lake, el asesor financiero contaba con una plantilla cercana a los 5.000 empleados y se había marcado superar los 250 millones de euros de facturación.
De todas formas, la incertidumbre sobre la economía española por la alta inflación y el débil crecimiento están frenando inversiones de los grandes fondos, que prefieren aguardar a la vuelta del verano para retomar o plantearse nuevas operaciones corporativas. En el mercado hay apetito y liquidez, pero se considera que los precios actuales de determinados activos pueden estar inflados y no reflejan la realidad de la economía tras el fin de las ayudas por la pandemia.