Este no será un buen año para los fondos de inversión, ni para los fondos de pensiones, porque está siendo un año nefasto para los mercados. A tres meses de que se cierre el ejercicio, mucho tienen que cambiar las cosas para que el nuevo dinero invertido en los 2.679 fondos que controla Inverco supere los reembolsos exigidos por los partícipes. A 30 de septiembre, último dato publicado por la patronal del sector, el saldo es negativo en más de 760 millones de euros, aunque llegó a ser ocho veces superior. Si se mantuviera esta tendencia se repetiría una situación inédita desde 2012.
Otro de los aspectos más preocupantes para el sector es la evolución del patrimonio, que va directamente ligada a la cotización de los valores de renta fija o variable que los fondos eligen para operar. A cierre del pasado mes, ascendía a 264.208 millones de euros, 12.421 millones menos que a finales de 2019. En este momento es casi imposible realizar el más mínimo acercamiento a cómo puede terminar el año. El mejor comportamiento lo están teniendo los fondos de Kutxabank, Ibercaja y Bankia, los únicos de entre los diez mayores grupos, que presentan crecimientos a cierre de los nueve primeros meses del año.
En los últimos seis meses el patrimonio se ha ido recuperando paso a paso a medida que se disipaba el pesimismo de los ciudadanos. Pero si la evolución de la pandemia obligara a un endurecimiento de la condiciones de los actuales confinamientos, lo que no es descartable, el pánico volvería a adueñarse de los inversores y los reembolsos se multiplicarían.
No hay que olvidar que en marzo, cuando se decretó el estado de alarma, el patrimonio cayó en 23.781 millones en un solo mes, hasta los 247.471 millones de euros. Una parte importante fue debida al desplome de las Bolsas mundiales en esas fechas, pero otra fue consecuencia de la necesidad de disponer de liquidez, razón por la cual los partícipes solicitaron reembolsos por valor de 18.920 millones. Algo más de 12,2 millones de personas confían parte de sus ahorros a los fondos de inversión. Son 535.000 más que a finales del pasado año y casi un millón más que en junio de 2019.
Kutxabank, a la cabeza
Por grupos, el mejor comportamiento lo está teniendo Kutxabank. El patrimonio de sus fondos ha crecido en lo que va de año un 5,68%, hasta alcanzar los 16.800 millones. Mantiene el sexto lugar del ranking, inmediatamente por delante de Ibercaja, y ha reducido distancias con Crédit Agricole. La antigua caja de ahorros aragonesa ha mejorado sus números un 2,74% y ha cerrado septiembre gestionando 14.364 millones. Bankia cierra este podio, con un aumento dinero de sus fondos del 1,61%.
No les ha ido bien a los tres mayores grupos del sector. Caixabank, el líder indiscutible con 46.388 millones de euros, ha “perdido” un 1,75% de su patrimonio en lo que va de año, menos que Santander (-5,41%) y BBVA, el más perjudicado por la situación. El banco que preside Carlos Torres se ha dejado un 9,74%, el equivalente a más de 4.000 millones de euros.
Entre los diez primeros grupos solo uno, Mutua Madrileña, no pertenece al sector bancario. Ocupa el noveno puesto del ranking, con 7.215 millones de euros gestionados en fondos, por delante de Unicaja, que maneja 5.104 millones. El top ten gestiona un total de 217.299 millones de euros, el 82,2% de la cifra global. Sólo 23 grupos de los 91 controlados gestionan patrimonios por encima de 1.000 millones de euros, según Inverco.
Todos estos números reflejan la alta volatilidad del sector, fuertemente influido por la marcha de la actividad económica y de las fluctuaciones bursátiles, que hacen que la rentabilidad pueda ser negativa en plazos de hasta tres años, como sucede ahora, y ascender al 1,79% a diez años. En enero, por ejemplo, las suscripciones netas (la diferencia entre el dinero nuevo que entra en los fondos y los reembolsos) ascendieron a 1.565 millones de euros. Sólo dos meses después, con España confinada, el saldo pasó a ser negativo en 5.571 millones, el peor registro en lo que va de año.
En los nueve primeros meses, las suscripciones brutas han totalizado 75.432 millones y los reembolsos, 76.193 millones. En ambos casos, el dato es un 15% inferior al de los mismos meses de 2019. El peor balance corresponde a 2008, con entradas de 119.436 millones y salidas por 177.083 millones, lo que provocó el mayor saldo negativo de lo que va de siglo. Esa tendencia continuó hasta que se revirtió en 2013, con el primer crecimiento intertrimestral del PIB español después de la crisis.