El Servicio de Estudios de BBVA (BBVA Research) ha presentado sus nuevas previsiones para España, en las que se muestra más optimista que el Gobierno y espera que el PIB crezca un 2,7% este año y el próximo. Eso sí, avisa de que sigue habiendo riesgos que rodean a estas previsiones y pide que se vigile de cerca la evolución de los salarios, dado el repunte de los precios en el mes de enero y la fuerte subida del 8% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) aprobada por el Gobierno.
Al banco le preocupa, sobre todo, esta última subida del SMI. Aunque estima un efecto marginal en PIB y empleo por el escaso número de trabajadores afectados, reconoce que teme que otros salarios se contagien de este incremento, sobre todo los más bajos, que superan el nuevo SMI, pero no por mucho. Según el responsable de análisis macroeconómico de BBVA Research, Rafael Doménech, es un elemento que hay que vigilar de cerca.
Tal y como ha dicho, las subidas salariales son bienvenidas y cuánto más altas sean mejor, pero siempre tienen que ir ligadas a la productividad y permitir que se siga reduciendo el desempleo que, según las previsiones del banco, bajará al 17,5% este año y al 15,8% el año que viene, gracias a la creación de unos 900.000 empleos a lo largo del periodo. Aunque la previsión de empleo es buena, Doménech recuerda que el paro sigue siendo mucho más elevado que el de la zona euro.
La incertidumbre política y los cambios en Sociedades son algunos de los riesgos a nivel interno
El nuevo escenario de PIB y empleo, que es más optimista que el del propio Gobierno, permitirá cumplir los objetivos de déficit del 3,1% y el 2,2%, sin la necesidad de nuevas medidas. BBVA es de los pocos servicios que cree que el 3,1% es posible, otros organismo como Funcas o la propia Comisión, creen posible que el Gobierno tenga que tomar nuevas medidas.
En cualquier caso, el banco avisa de que los riesgos externos e internos para el crecimiento persisten, como el Brexit o la victoria de Donald Trump en Estados Unidos. A nivel interno, la incertidumbre sobre la política económica se mantiene elevada, así como las dudas sobre la aprobación de los Presupuestos de 2017 y los últimos cambios fiscales, como los de Sociedades, que generan cierta incertidumbre jurídica.
