El presidente del BBVA, Francisco González, ha recomendado al Ejecutivo que salga de las elecciones generales previstas para el próximo 20 de diciembre que aplique una política que garantice "cuanta menos incertidumbre y cuanta más seguridad jurídica mejor" para potenciar la creación de empleo. "Aquí lo que hay que hacer es crear puestos de trabajo", ha incidido. Por lo tanto, el Gobierno que surja, cualquiera que sea su signo político, a mi modo de ver debería entender muy bien cuáles son las dinámicas de la economía de libre mercado y de un Estado de derecho para que podamos seguir creciendo".
"Ha habido episodios de corrupción que han impactado muchísimo a la población española y eso hay que corregirlo", ha incidido González
González ha participado en la reunión anual del Institute of International Finance (IIF) que se celebra este fin de semana en Lima (Perú). Durante su intervención ha insistido sobre el hecho de que, a su juicio, España ha crecido bien durante los últimos años. "Llevo muchos años viajando por el mundo y he visto varios ciclos de la historia española, buenos, malos, regulares…Es evidente que en este momento hay un gran respeto por lo que se ha hecho en España desde el punto de vista económico", ha incidido. Pero también ha advertido que "no debemos caer en la complacencia porque tenemos una tasa de paro todavía muy alta, realmente insoportable, del 22% y, también ha habido episodios de corrupción que han impactado muchísimo a la población española y eso hay que corregirlo".
Nuevas tecnologías
En lo referente al sector financiero, ha señalado el entorno digital y la adaptación del sector al nuevo paradigma como "algo masivo, que está en marcha y que se acelera cada vez más". De hecho, ha explicado que, tras la inversión de su entidad en una nueva plataforma digital, los sistemas del banco "procesan en la actualidad más de 450 millones de transacciones en los días de máxima actividad, cinco veces más que en 2006".
En todo caso, además de referirse al "rápido crecimiento" que experimentan algunas empresas del sector financiero -de las que afirma que "todavía dependen de la estructura bancaria de los bancos convencionales"- ha instado a las autoridades a "revisar la regulación con el fin de permitir a los bancos utilizar las nuevas tecnologías para ofrecer a los clientes servicios mejores, más ajustados y baratos". Así, pese a que ha reconocido la "difícil tarea del regulador" ha insistido en la necesidad de impulsar un nuevo marco regulatorio para "compaginar" el control de la actividad financiera y la protección a los consumidores con "la posibilidad de que se beneficien de costes reducidos y mejoras para los consumidores".