Dos semanas después de las elecciones autonómicas y municipales, el Ibex ha comenzado a pronunciarse sobre los efectos que esos comicios pueden tener el presente político en España. Francisco González, presidente de BBVA, ha sido el primero en pronunciarse sobre el cambio en el mapa político y la toma del poder en los Ayuntamientos de las diversas siglas bajo el paraguas ideológico de Podemos. Una ascensión que el banquero observa con recelo.
"La alternancia política es positiva, facilita la transparencia y evita el enquistamiento de problemas. Pero para que la alternancia sea buena es preciso que la alternativa también lo sea", aseguró González, en su intervención en el curso de la Asociación de Periodistas Económicos (APIE) que se celebra en la Universidad Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander. Precisamente, en esta alternancia es donde el presidente de BBVA ve el mayor peligro. "El riesgo más grave de la alternancia es el populismo. Hay que establecer la diferencia con el verdadero populismo que atenta contra el sistema institucional, que ha fracasado siempre y en todos los países", sostiene.
El banquero no citó a Podemos en ningún momento durante una dura intervención con las tesis de cambio que pregona el partido de Pablo Iglesias. "Los populismos son un viaje a ninguna parte, lo hemos visto en el pasado y lo seguimos viendo en el presente en algunos países de Europa. Ese populismo puede poner en riesgo cuanto hemos avanzado en todos estos años con destrucción no sólo de puestos de trabajo, sino también de riqueza", ahondó González.
Es más, el presidente de BBVA lanzó un claro mensaje al perfil de votante de Podemos. "Siempre son los más débiles, quienes peor lo han pasado, los que pagan estos errores", sostiene FG. Por ello, el banquero considera que los resultados de las próximas elecciones generales serán muy diferentes a los registrados el pasado 24M con un voto que frene a la formación de Iglesias. "La sociedad española va a elegir el camino del trabajo serio y realista", auguró.
A su juicio, el ascenso de Podemos se ha alimentado por los múltiples casos de corrupción que están enquistados en las diferentes instituciones públicas. El mismo razonamiento que utilizó la pasada semana Mariano Rajoy cuando aseguró que los malos resultados del PP se deben a que "las televisiones han estado martilleando continuamente con casos de corrupción". "Es cierto que la recuperación no ha llegado a todo el mundo pero también es cierto que la corrupción impide que la sensación de mejora económica llegue a todo el mundo", sostiene González.
