El BBVA obtuvo un beneficio neto de 2.649 millones de euros entre enero y junio, un 15 % más que un año antes, debido a los mayores ingresos, a la contención de los gastos y a las menores necesidades de saneamientos y provisiones que tuvo que dotar.
En un comunicado remitido hoy al supervisor español de los mercados, la CNMV, la entidad ha añadido que los préstamos y anticipos a su clientela se redujeron el 8 % y quedaron en 390.661 millones de euros, con un ratio de mora del 4,4 %, frente al 4,8 % de junio de 2017.
Asimismo, su ratio de solvencia CET1 "fully loaded", que incluye todos los requerimientos de capital, se situó en el 11,40 %, incluyendo la venta de BBVA Chile y el acuerdo con el fondo Cerberus para reducir la exposición al negocio inmobiliario.