BBVA se queda con parte del megapuerto de Estambul. El grupo de La Vela, a través de su filial Garanti, controlará algo más del 12% de Galataport antes de que finalice este año tras convertir en capital parte del crédito concedido al magnate turco Ferit Sahenk para desplegar este proyecto en más de un kilómetro a lo largo del Bósforo.
Galataport se abrió en 2021 para brindar a Estambul de una terminal de cruceros, rodeada de centenares de tiendas, un hotel e incluso un museo de arte moderno. El proyecto fue impulsado por el Grupo Dogus, propiedad de Sahenk, con la meta de atraer más de 20 millones de visitantes y pasajeros.
Pero las dificultades económicas por las que atraviesa Turquía provocaron el retraso en la construcción y el negocio no está respondiendo a las expectativas iniciales. El proyecto en su conjunto, valorado en unos 2.000 millones inicialmente, no termina de remontar por problemas para generar ingresos y en los últimos meses arrastra dificultades de caja.
BBVA y el resto de acreedores de Dogus pactaron reestructurar unos 1.000 millones de deuda en capital para dar oxígeno financiero al magnate. Según los datos facilitados por Garanti, BBVA tendría en sus manos al menos 250 millones, pero hay otra parte de deuda que se ha decidido no convertir. Fuentes oficiales del banco español descartan un impacto significativo sobre la solvencia tras este pacto de reestructuración.
Socio de BBVA
En total, los acreedores tomarán el 49% del megapuerto de Estambul. Entre los prestamistas de Dogus que también tomarán capital del megapuerto se encuentran el banco público turco Yapi Kredi Bankasi (que controlará el 13,2%) y el privado Turkiye Is Bankasi.
En cualquier caso, esta participación puede ser temporal. El acuerdo de reestructuración da tres años al magnate turco para recomprar esta parte del capital de Galataport.
Sahenk, uno de los hombres más ricos de Turquía, fue el socio que llevó de la mano a BBVA para iniciar su andadura en el país otomano en 2011. En ese momento, el grupo de La Vela se hizo con un 25,01% de Garanti que tenían Dogus y General Electric. En 2015, BBVA se convirtió en el primer accionista, al aumentar su participación hasta un 39,90% mediante la compra de un paquete adicional de acciones a Dogus.
En 2017, BBVA incrementó su participación hasta el 49,85% y en mayo de 2022 pasó a controlar el 86% tras lanzar una opa. Con los 5.000 millones que el magnate turco obtuvo por las ventas a BBVA, realizó inversiones millonarias en puertos deportivos, hoteles y restaurantes en Turquía.
Apuesta por Turquía
BBVA mantiene su apuesta por el país otomano pese a la debilidad de la economía y el impacto de la hiperinflación. De hecho, en las cuentas de 2023 el grupo recortó en 400 millones de euros el valor contable de su filial turca Garanti, que arrastra una crisis de precios e inestabilidad política en los últimos años. La entidad presidida por Carlos Torres acumula ya una minusvalía que asciende a 1.600 millones desde su desembarco en 2011.
Y la situación económica no termina de despegar en el país. De hecho, el servicio de estudios de BBVA acaba de rebajar la previsión de crecimiento de la economía, que ahora sitúa en el 2,5% en 2025 (frente al 2,7% anterior) y un 4,5% en 2026 (frente al 5,2% anterior). También ha empeorado las estimaciones en la lucha contra la crisis de precios, al esperar un IPC del 44,5% para finales de este año.