A rey muerto, rey puesto. Esta es la filosofía aplicada por el Ejecutivo de Mariano Rajoy en asuntos que parecen correrles cierta prisa. Y es que apenas tres días después de que Magdalena Álvarez dimitiera como vicepresidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI) alegando "los intentos del Gobierno de acabar con ella", este mismo sábado se ha hecho público que Román Escolano será su sustituto.
El hasta ahora presidente del Instituto de Crédito Oficial (ICO) llega apadrinado por el expresidente del Gobierno José María Aznar y el actual ministro de Economía, Luis de Guindos, quien precisamente sigue en la carrera para acceder al reparto de altos cargos en la Unión Europea.
Como ya adelantó 'Vozpópuli' el pasado mes de febrero, la desbandada del equipo que formó Guindos se confirma. Ante la probable salida del ministro del Gabinete de Rajoy rumbo al Eurogrupo, el nombre que aparece en todas las quinielas para reemplazarle es el de Álvaro Nadal. Además, otros muchos cargos intermedios próximos al titular de Economía y Competitividad ya están buscando sitio en otros lugares, entre ellos, el actual secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, que ha 'fichado' por el Fondo Monetario Internacional, donde se incorporará en noviembre.
Y no es el único. En el desmantelamiento del núcleo duro de Economía también figuran otros cargos designados por Guindos como Luis Linde, José María Marín Quemada o Belén Romana.
En lo que respecta al sustituto de Álvarez, distintas fuentes sostienen que se trata de un hombre muy próximo a Aznar. Procede de BBVA y tomará el relevo de la exministra socialista en la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero en el BEI probablemente durante el mes de julio, según han informado a Europa Press fuentes del Ministerio de Economía y Competitividad.
Ha sido propuesto por España de acuerdo con el Gobierno portugués, han explicado fuentes de Economía. Las mismas fuentes destacan su "perfil técnico y profesional" y su experiencia en el sector financiero, así como su actividad durante los últimos dos años al frente del ICO.
Experiencia en el sector financiero
Escolano fue nombrado presidente del Instituto de Crédito Oficial (ICO) en enero de 2012, procedente de BBVA, donde era director de relaciones institucionales. Desde 2000 hasta 2004 fue director del departamento de Economía del Gabinete de José María Aznar. Previamente fue asesor del secretario de Estado para las Comunidades Europeas, consejero de la Oficina Comercial de la Embajada de España en Tailandia y Asesor del Ministro de Trabajo y Asuntos Sociales.
Magdalena Álvarez atribuyó su marcha del BEI a "una campaña de acoso y derribo" del Gobierno, especialmente por parte de Guindos
Ha sido miembro de los consejos de administración de Correo, FEVE y del ICEX. El nuevo vicepresidente del BEI es economista y pertenece al Cuerpo de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado, con el número uno de su promoción. Es licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Autónoma de Madrid y ha realizado un programa de alta dirección de empresas del IESE.
Comprometía la reputación del BEI
Magdalena Álvarez atribuyó su marcha a "una campaña de acoso y derribo" del Gobierno y la desligó de su imputación formal, al tiempo que acusó al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y al ministro de Economía, Luis de Guindos, de "querer poner a otro" en su puesto, algo que tras el nombramiento de este sábado parece darle la razón.
Desde 2000 hasta 2004, Escolano fue director del departamento de Economía del Gabinete de José María Aznar
A raíz de la imputación formal de Álvarez en el caso de los ERE, el Gobierno solicitó opinión al comité ético del BEI, que concluyó que esta situación comprometía de forma sustancial la reputación de la institución. De hecho, el consejo de administración del BEI tenía previsto debatir y votar, a petición de España y Portugal, la destitución de Álvarez en una reunión prevista para el 22 de julio.
Magdalena Álvarez asumió su cargo en el BEI en 2010 como parte de un acuerdo entre España y Portugal para rotar su representación en el Comité de Dirección de la institución. Su salario superaba los 23.000 euros al mes.El mandato de Álvarez expiraba en dos años y el Gobierno tenía cerrado un acuerdo con Portugal para nombrar a otro representante español en sustitución de la exministra.
Al margen de su dimisión, Álvarez disfrutará de un retiro dorado ya que se marcha de su puesto de vicepresidenta del BEI cobrando 10.000€ al mes hasta su jubilación, para después disfrutar de una pensión vitalicia, tal y como informó 'Vozpópuli'