La Comisión Europea (CE) ha abogado este martes por sancionar a los países de la Organización Mundial del Comercio (OMC) que incumplan sus obligaciones de forma reiterada, entre otras medidas que recoge en un documento de reflexión para impulsar la reforma de ese organismo.
"A pesar de su éxito, la OMC no ha sido capaz de adaptarse suficientemente a una economía global que cambia rápidamente. El mundo ha cambiado pero la OMC, no", ha señalado la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmström, quien presentó la iniciativa para modernizar la institución en una rueda de prensa.
"Probablemente está en su peor crisis hasta ahora", opinó Malmström, quien advirtió de que "la responsabilidad de reformar la OMC recae en sus miembros".
El mundo ha cambiado pero la OMC, no
Esa reforma enfrenta como uno de los principales obstáculos el proteccionismo que imprime el Gobierno de Donald Trump a la política comercial de Estados Unidos, país que bloquea medidas como la designación de nuevos miembros del órganos de apelación del mecanismo de resolución de disputas de la OMC.
La propuesta de hoy de la CE, que se presentará en Ginebra este jueves durante una reunión convocada por Canadá, responde al mandato recibido de los líderes de la UE de modernizar la OMC y hacerla más eficaz.
Áreas de trabajo
La iniciativa sienta directrices para empezar ese trabajo, que organiza entorno a tres áreas fundamentales:
- adaptar las normas del comercio internacional a la economía global,
- reforzar el papel de control de la organización
- y superar el "inminente punto muerto" del sistema de resolución de disputas de la OMC.
Dentro de ese mayor control, Bruselas pide instrumentos para hacer cumplir las reglas y trabajar en "desarrollar sanciones que sean eficaces, justas y proporcionadas". Esas medidas podrían limitar los derechos de los países infractores en la organización, precisó.
La CE lamentó además que las subvenciones que distorsionan el mercado, a menudo canalizadas a través de empresas de propiedad estatal, no están reflejadas en las actuales normas comerciales internacionales, lo que merma la igualdad de condiciones de los agentes económicos.
Reforma de la OMC
Otro punto que pidió la CE en la reforma del organismo es que éste se ocupe de las barreras a las que se enfrenta el comercio electrónico, así como de los obstáculos en el acceso a mercados, el trato discriminatorio a inversores extranjeros o distorsiones relacionadas con la transferencia forzada de tecnología.
La Comisión explicó que ya ha empezado a abordar el asunto con socios como Estados Unidos y Japón a nivel trilateral, o con China en el marco de un grupo de trabajo impulsado con ocasión de la última cumbre de la UE con ese país.
También tuvo ocasión de tratar esta modernización en la reunión de ministros de Comercio del G20 en Mar del Plata (Argentina) de la semana pasada.
Aseguró que seguirá discutiendo estas "primeras ideas" presentadas este martes con los socios de la OMC en las próximas semanas, con vistas a preparar "propuestas concretas".
En este proceso, dejó claro que el Parlamento Europeo y el Consejo, en el que están representados los gobiernos de los Veintiocho, estarán informados.
La Comisión Europea es la institución de la UE con la competencia de representar a los países en materia de comercio internacional, y de negociar en su nombre acuerdos en ese ámbito.
"La OMC está cada vez más sobrecargada por la rigidez de los procedimientos y los conflictos de interés entre los países", subrayó la CE, que lamentó que la rama que se encarga de los litigios comerciales esté "a punto de quedar paralizada" por el bloqueo de los nombramientos de nuevos miembros del órgano de apelación.
Además, consideró que el papel de la OMC como órgano de supervisión se ve "amenazado por la falta de transparencia de muchos países".