El Gobierno retrasa la petición de 70.000 millones en préstamos del Plan de Recuperación pendientes y acompasará la presentación de esta adenda a la subida de tipos del Banco Central Europeo (BCE). La vicepresidenta primera para Asuntos Económicos, Nadia Calviño, anunció ayer a su llegada al Eurogrupo en Bruselas que este trámite, que había planteado que tendría lugar en el primer semestre, y que se esperaba incluso en mayo, se realizará finalmente en la segunda mitad del año.
Horas antes, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, avanzaba en un post oficial que la primera subida de tipos llegará a finales del tercer trimestre una vez se hayan retirado todos los estímulos, lo que dejará Europa con un tipo negativo al menos hasta septiembre o, incluso, más allá. La petición de estos préstamos por parte del Ejecutivo español se liga a las decisiones de política monetaria del BCE para aprovechar los últimos momentos en que la financiación sea más ventajosa.
La previsión de endurecimiento de las condiciones de financiación de la deuda pública aceleró los planes del Gobierno a finales de año, cuando anunció que los adelantaba y pediría los préstamos este año. De hecho, si no se anticipara esta petición, el Ejecutivo podría incurrir en irresponsabilidad de cara a futuros Gobiernos españoles, trasladaban fuentes conocedoras de la gestión pública.
Dentro de tres o cuatro años, el mercado de deuda estará mucho más complicado que ahora, y se podría pedir responsabilidades a quien no tomara la decisión de pedir esos recursos a un coste razonable que cuando sea mucho más costoso y difícil. Se trata de una decisión de política monetaria de deuda del Estado en las que se decide que no se puede renunciar a obtener fondos en condiciones favorables.
Calviño señaló en diciembre que pediría esta adenda en 2022 y apuntó a primavera. El anuncio no se esperaba en un momento en el que el Gobierno iba a tener en caja cerca de 20.000 millones que irían creciendo, de los que ha ejecutado en términos reales, en contabilidad nacional, una cantidad muy pequeña. Los Presupuestos Generales del Estado para 2022 ya prevén una dotación de 26.900 millones de euros con cargo a los fondos del Plan de Recuperación.
Este anuncio se produjo además en un momento de escasísima ejecución real, es decir, que haya llegado a las empresas, de la que sólo siguen reconocidos oficialmente 104 millones de euros hasta agosto de 2021, lo que la Autoridad Independiente de Responsabilidad FIscal (AIReF) y otros organismos exigen que se haga público.
Con esta dilación, España se distancia aún más de Italia, Grecia o Portugal, entre las economías más afectadas por la pandemia, que ya han pedido estos préstamos.
España presentará una adenda a los fondos europeos en la segunda parte del año para "cubrir las posibles transferencias adicionales, movilizar los créditos y cubrir el nuevo apartado de REPoweEU [plan de Bruselas para la desconexión energética de Rusia] ", ha detallado Calviño.
Asignación y reformas
La vicepresidenta ha explicado que "a finales de junio tendremos los datos finales de la asignación del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia en los distintos Estados miembros. Y, una vez que tengamos la asignación definitiva en el caso de España, prepararemos esa adenda para presentarla en la segunda parte del año, con el fin de cubrir las posibles transferencias adicionales, movilizar los créditos y también cubrir ese nuevo apartado de REPowerEU de la eficiencia energética y la autonomía estratégica en el ámbito energético. Lo presentaremos en la segunda parte del año, después de un trabajo de preparación de esta segunda fase de inversiones del Plan de Recuperación".
De momento, se conoce que, según el Reglamento del Plan, España recibirá unos 4.000 millones más de fondos europeos por la ralentización de la recuperación y la rebaja del crecimiento.
Calviño ha añadido además que también se preparan reformas para cumplir con las exigencias que vaya planteando la Comisión, en lo que apuntaría a las que suscite la reforma de las pensiones, por ejemplo.
La vicepresidenta económica ha insistido en que "España movilizará el 100% de los créditos asignados" cuando se presente la adenda: "En la primera fase del Plan presentamos la solicitud de las transferencias, una cantidad de 60.000 millones de euros. Y en esta segunda fase vamos a movilizar tanto cualquier transferencia adicional que se asigne España como el conjunto de los créditos, y también activar las inversiones recomendadas dentro de esta comunicación REPowerEU, que presentó la Comisión Europea la semana pasada".