Cellnex ha registrado en los nueve primeros meses del año unas pérdidas de 26 millones de euros, frente a los 29 millones que ganó en el mismo período del año anterior en base a la nueva normativa contable, debido al impacto de las provisiones por el ERE en sus filiales Tradia y Retevisión.
Sin tener en cuenta estos impactos no recurrentes, la compañía habría obtenido entre enero y septiembre un resultado positivo de 20 millones, influido también por las mayores amortizaciones, que suben un 19 % interanual, y los costes financieros asociados al crecimiento del grupo, que aumentan un 42 %.
Según ha informado hoy Cellnex a la CNMV, el regulador bursátil, los ingresos han alcanzado a cierre del tercer trimestre los 665 millones de euros, un 15 % más, mientras que el ebitda (beneficio bruto de explotación) ha crecido un 19 %, hasta los 439 millones.
Cellnex, el principal operador de infraestructuras de telecomunicaciones inalámbricas de Europa, provisionó en el primer trimestre 55 millones correspondientes al plan voluntario de prejubilaciones y bajas incentivadas acordado en el mes de marzo en Retevisión y Tradia.
Este plan supondrá la salida voluntaria de 180 trabajadores entre este año y el próximo.
Según el consejero delegado de Cellnex, Tobías Martínez, los datos acumulados de los primeros nueve meses del año muestran crecimientos de dos dígitos que son reflejo de las operaciones realizadas en 2017 y 2018, como la integración de Xarxa Oberta de Catalunya o la incorporación de nuevos activos en Francia en el marco de los acuerdos con Bouygues Telecom.
Martínez destaca, en este sentido, las posibles operaciones de consolidación que ofrece el sector de las infraestructuras de comunicaciones en Europa.
Centrados en el exterior
"Observamos con atención e interés las oportunidades de crecimiento en este mercado, ya sea la externalización de activos por parte de los operadores o procesos de consolidación entre distintos grupos del sector", explica el primer ejecutivo de Cellnex, que cree que estos movimientos corporativos, junto el despliegue de las redes 5G, "hacen de Europa un mercado estratégico".
Por negocios, el que mayor ingresos aporta a Cellnex, con un 65 % del total, son los servicios de infraestructuras para operadores de telecomunicaciones móviles, con 432 millones de euros, un 27 % más.
La actividad de infraestructuras de difusión aporta un 26 % de los ingresos, con 175 millones, y el negocio centrado en las redes de seguridad y emergencia y las soluciones para ciudades inteligentes y el internet de las cosas contribuyen con un 9 % de la facturación, con 59 millones.
Cellnex obtiene ya el 48 % de sus ingresos y un 56 % del ebitda fuera del mercado español, siendo Italia el segundo mercado más importante, con un 29 % de las ventas.
La empresa cuenta actualmente con 22.285 emplazamientos en España, Italia, Holanda, Francia, Reino Unido y Suiza, a los que se suman 1.453 nodos (DAS y Small Cells), un 20 % más que en septiembre de 2017.
En cuanto a las inversiones, han alcanzado los 392 millones entre enero y septiembre, en su mayoría destinadas a la generación de nuevos ingresos, como la incorporación de emplazamientos en Francia, pero también a la mejora de la eficiencia y el mantenimiento de la capacidad instalada.
La deuda neta del grupo a 30 de septiembre alcanza los 2.922 millones, frente a los 2.677 millones de 2017, y la compañía cuenta con acceso a liquidez inmediata por un importe aproximado de 1.685 millones.
La compañía mantiene su perspectiva para el ejercicio 2018 en la banda alta de las previsiones iniciales, con un ebitda que se situaría entre los 584 y los 589 millones.
Marco Patuano es desde julio el presidente no ejecutivo de Cellnex, que cotiza en la Bolsa española y forma parte de los selectivos IBEX 35 y Eurostoxx.