La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) acaba de enviar un demoledor informe a la Comisión Europea rebatiendo sus principales argumentos de cara a la entrada en vigor de los servicios de roaming sin recargo en todos los países de la UE a partir del 15 de junio de 2017 (Reglamento 531/2012 de Itinerancia en la UE).
Bruselas se niega a aceptar el hecho diferencial de España como receptor de más de 70 millones de turistas al año (el 81% proveniente de la UE) a la hora de fijar los costes de los servicios mayoristas y minoristas de datos a través del móvil. El planteamiento del Ejecutivo comunitario es que, “aún ‘tomando en consideración’ el potencial impacto de la naturaleza estacional del tráfico de itinerancia con el objeto de mitigar cualquier incremento de costes a raíz de los costes causados por la estacionalidad del tráfico (uso intensivo de las redes de los operadores españoles por los turistas en los meses de julio y agosto), se rechaza rotundamente tener en cuenta la estacionalidad para los servicios de datos”, denuncia en su informe la CNMC.
El regulador español critica que la CE reconozca que la tendencia del tráfico doméstico de datos es creciente, pero a la vez señale que “cualquier pico de tráfico estacional en un año será superado por la demanda total de tráfico doméstico en el futuro”.
La CNMC recuerda que "los operadores españoles reciben 11,1 veces más tráfico de datos que el que sus usuarios cursan en otras redes de la UE" por el impacto de los turistas extranjeros en verano
La CE defiende que “las redes se dimensionan para los años futuros y, por tanto, los picos de tráfico no serían relevantes en el dimensionado de costes de la red móvil. Por consiguiente, la CE no ha considerado los costes de estacionalidad del servicio de datos”.
La CNMC avisa de que los cálculos de Bruselas no tienen en cuenta todos los elementos de coste relevantes y que se sitúa por debajo del coste de prestación eficiente de servicio”, de forma que si sale adelante la propuesta de la CE, las inversiones de los operadores españoles en las redes y la calidad del servicio podrían verse afectado por unos costes que, para el caso español, son irreales, ya que “la estacionalidad tiene un impacto claro y muy significativo en los costes y , por ende, en las inversiones necesarias para dimensionar la red”.
El informe del regulador recuerda a Bruselas que en 2015, “los operadores españoles recibieron 11,1 veces más de tráfico de datos que el que sus usuarios cursaron en otras redes del Espacio Económico Europeo, con lo que los operadores españoles son receptores netos de tráfico de itinerancia y esta tendencia se acentúa en el tiempo”.
Si Movistar, Vodafone, Orange, MásMóvil-Yoigo y el resto de pequeños operadores españoles se ven obligados a asumir los sobrecostes del roaming para dejarlos a cero a partir de 2017 por imposición de Bruselas, no podrán afrontar las inversiones en mejoras de red y en calidad de servicio. “La reducción de los precios mayoristas a unos niveles que no permitan la recuperación de los costes podría eliminar los incentivos para invertir en la capacidad extra necesaria para la introducción de RLAH (‘itinerancia como en casa’, en sus siglas en inglés), por no mencionar el impacto en los mercados nacionales en el caso de que los nuevos niveles propuestos no permitan la recuperación de costes”.
La reducción de los precios mayoristas de datos a niveles que no permitan la recuperación de las inversiones pone en peligro la fiabilidad de las redes y la calidad de los servicios
En resumen, si los operadores españoles, obligados a atender a decenas de millones de turistas extranjeros en un periodo corto de tiempo, soportan los mismos costes mayoristas de datos que los islandeses o rumanos, habrá una clara discriminación pese a que la eliminación del roaming persiga precisamente lo contrario, la homogeneidad de precios y servicios en el seno del mercado único, defiende la CNMC.
El regulador recuerda que países como Croacia o Grecia estarían en ratios similares de impacto de la estacionalidad del turismo por ser países costeros.
El informe de la CNMC, aprobado el 7 de julio, se adjunta al proceso de consulta pública puesto en marcha por la UE, de cara a cerrar la redacción final de la normativa que acabará con el roaming a partir del año que viene.