La cárnica gallega Coren tiene una deuda pendiente con la Seguridad Social. Esta cooperativa, que llena la sección de carne de cadenas como El Corte Inglés, Carrefour, Eroski o Alcampo, declara que el organismo perteneciente al Ministerio de Trabajo exige esta compensación tras haber incorporado a su plantilla a cerca de 1.350 autónomos que, según determinó Inspección de Trabajo, operaban bajo un régimen de falsos autónomos.
"La Tesorería General de la Seguridad Social reclama las cuotas correspondientes a dichos trabajadores desde noviembre del ejercicio 2013 hasta noviembre del ejercicio 2017, estimando los efectos económicos en 18,08 millones para Coren y 4,7 millones para Novafrigsa (filial de Coren)", detalla la cárnica gallega en el folleto de su programa de pagarés que ha incorporado al Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF).
Coren ha preferido no realizar ninguna declaración sobre este hecho ante la solicitud de este medio. Por otro lado, la compañía explica en su documento que este procedimiento se encuentra actualmente suspendido en la vía administrativa. Y el gigante gallego, que factura más de 700 millones al año, espera que la resolución le sea favorable.
"La sociedad no ha realizado ninguna provisión ya que estima que del litigio no se derivará riesgo alguno, en base a sus conocimientos y a las alegaciones aportadas por el despacho de abogados que actualmente asesoran", añade el en su documento.
Comisiones Obreras (CCOO) reclama que, además de incorporar a estos trabajadores a la plantilla, Coren abone las cuotas de autónomos que han estado pagando estas personas durante este período. De media, el sindicato estima que cada autónomo pagaba de media al mes 250 euros, por lo tanto, si prospera esta propuesta el proveedor de carne de Eroski y Alcampo debería abonar cerca de 15 millones de euros adicionales.
Un primer capítulo
Este litigio es una derivada de la resolución que comunicó en julio de 2018 la Tesorería General de la Seguridad Social a Coren. La cárnica se veía obligada a incorporar a su plantilla en agosto de ese año a este millar de falsos autónomos pertenecientes a Servicarne, un socio de Coren que fue calificado por el Ministerio de Trabajo como una "falsa cooperativa".
Servicarne ha sido considerada con una de las mayores cooperativas de trabajo asociado que desarrollan su actividad en el sector cárnico. Sus 5.000 "socios trabajadores" se daban de alta como autónomos y que trabajaban en mataderos de diferentes empresas, como es el caso de Coren.
Los nuevos trabajadores de Coren suponen un gasto extraordinario en sus cuentas de 3,8 millones de euros
Este socio de Coren recibió en este mes de julio el respaldo del Juzgado de lo Social de Ourense. Este tribunal concluía que Servicarne sí es una cooperativa, sus trabajadores son socios y no falsos autónomos tal como concluyó la Inspección de Trabajo. Una posición que desestima a la Tesorería General de la Seguridad Social y que CCOO ha recurrido.
Aunque esta decisión no afecta a los trabajadores que Coren incorporó a su plantilla. La empresa informó, tras la sentencia de Juzgado de lo Social de Ourense, que mantendrá a estos trabajadores en su plantilla. No obstante, la cárnica mantendrá su batalla legal con este proceso en el Tribunal Superior de Justicia de Galicia, ya que esta nueva masa laboral supone un gasto extraordinario en sus cuentas de 3,8 millones de euros.
