El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 0,2% en diciembre en relación al mes anterior y elevó tres décimas su tasa interanual, hasta el -0,5%, por el encarecimiento de la electricidad y de las gasolinas.
Con el dato de diciembre, el IPC interanual encadena su novena tasa negativa consecutiva, según los datos definitivos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que coinciden con los avanzados a finales del mes pasado.
El cierre en negativo del IPC en 2020 ha permitido a los salarios ganar más de dos puntos de poder adquisitivo. En concreto, la subida salarial pactada en convenio cerró el año pasado en el 1,89%, casi 2,4 puntos por encima del IPC interanual de diciembre.
El INE ha atribuido el repunte de la tasa interanual del IPC de diciembre al avance de los precios de la electricidad, del gasóleo para calefacción y de los carburantes y lubricantes.
Inflación subyacente
En el último mes del año pasado, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el -0,6%, dos décimas por encima de la de noviembre.
La inflación subyacente, que excluye los alimentos no elaborados y los productos energéticos, disminuyó una décima en diciembre, hasta el 0,1%, con lo que se sitúa seis décimas por encima de la tasa de IPC general.