En España hay alrededor de 48.000 vehículos catalogados como históricos, una cifra muy alejada de los 600.000 de Alemania y los 1,5 millones del Reino Unido. La complejidad del trámite y el desembolso que supone pueden explicar la cifra de nuestro país, que podría aumentarse en 150.000 más con la reforma de actual Reglamento.

Y es que Tráfico ha diseñado una reforma de la normativa que agilizará la burocracia y abaratará los costes, como explica en declaraciones a EFE el subdirector de Normativa de la Dirección General de Tráfico (DGT), Francisco de las Alas Pumairiño, quien recuerda el requisito fundamental para catalogar así un vehículo: tener una antigüedad de más de 30 años.

Será más barato hasta el punto de que de los 800 euros que desembolsa ahora un propietario para registrar su coche como histórico, se pasaría a entre 80 y 90 euros.

Esta reducción en el coste es una de las medidas que la DGT ha propuesto incorporar en el borrador del nuevo Reglamento de Vehículos Históricos que ya ha pasado el trámite de información pública y que podría aprobarse en otoño, una vez que diversos ministerios y el propio Consejo de Estado le den su visto bueno.

La actual norma data de 1995 y no es precisamente un reglamento que anime a los españoles a iniciar los trámites para poder conservar el coche como un vehículo de interés histórico.

Pero de momento, según datos de la DGT, en un país que llegó a ser el quinto del mundo en fabricación de coches solo hay algo más de 48.000 catalogados como históricos, a pesar que los cálculos de los responsables de Tráfico cifran en unos 150.000 más los susceptibles de llegar a serlo.

¿Por qué un nuevo reglamento?

La respuesta a esta pregunta aparece claramente en el texto sometido a información pública y lo reitera De las Alas. Uno de los argumentos de Tráfico para justificar la reforma es facilitar la conservación del patrimonio cultural e industrial automovilístico, además de favorecer el sector económico de los profesionales y empresas de restauración de vehículos.

Evitar la pérdida o la salida de vehículos históricos fuera del territorio nacional y establecer una regulación semejante a la que actualmente tienen otros países de la Unión Europea y de nuestro entorno son los otros motivos que alega la DGT.

La nueva norma también regulará la posibilidad de circulación de los vehículos históricos en vías urbanas donde se establezcan restricciones de circulación por motivos medioambientales, a fin de "facilitar su uso y, en consecuencia, su conservación".

De las Alas recuerda que el sistema vigente para la clasificación de los vehículos como históricos es "muy complejo, laborioso y largo, a la vez que muy costoso".

El proceso pasa por varias administraciones, entre ellas las comunidades autónomas, donde se observa incluso una disparidad de precios a la hora de emitir la resolución correspondiente: desde la gratuidad de algunas hasta los 160 euros que piden otras.

¿Cuáles son las novedades que introducirá el nuevo reglamento?

El subdirector de Normativa de la DGT recuerda que con la norma vigente todos los vehículos que se quisieran catalogar como históricos tenían que pasar por el mismo procedimiento.

"Da igual que el vehículo esté matriculado en España, esté 'vivo', pague sus impuestos y pase sus ITV, como que sea un coche importado del que no se sabe nada de su administración. El procedimiento para ambos es el mismo", recalca De las Alas.

"No es razonable", afirma el subdirector. Y por ello, el nuevo Reglamento introducirá dos procedimientos distintos: uno más abreviado para los matriculados en España y otro más complejo para los importados, ya que estos precisan de un "estudio más detallado". Por tanto, se establecerán dos grupos.

- GRUPO A o los matriculados en España. Los vehículos no tendrán que contar con una matrícula específica, sino que podrán conservar la que tienen, porque, como dice De las Alas, tiene valor histórico en sí misma.

De esta forma, añade, se evitarán confusiones como ha ocurrido hasta ahora, ya que en algunos casos los coches mantenían las dos matrículas -la original y la histórica- y, por ejemplo, se ha denunciado a alguno por no tener seguro obligatorio, en función de la matrícula que anotó el agente, y sí lo tenía porque estaba adscrito a la otra matrícula.

Otra de las novedades es que solo hará falta realizar un cambio de servicio, es decir, ir a la administración y pedir que ese coche pase a ser de "servicio histórico" y que se quiere conservar la matrícula. Se emitirá un nuevo permiso para esas condiciones y, en suma, será un sencillo trámite que apenas le cueste 28 euros.

Y cuando le toque pasar la ITV, el propietario informará de ese cambio de servicio y se le impondrá una perioricidad de revisión, siempre cada más años que los vehículos ordinarios.

Para este Grupo A se eliminará también la obligatoriedad de enviar el vehículo a un "laboratorio" para examinarlo y comprobar si sus piezas son originales.

Cuando se apruebe el nuevo Reglamento, esto ya no será necesario, porque si hubiera sido objeto de una reforma importante constará en la ficha de su ITV. El paso por el "laboratorio" se sustituirá por una "declaración responsable" en la que se asegure que no ha sufrido modificaciones que comprometan la autenticidad del vehículo.

En cualquier caso, y de acuerdo con las recomendaciones de la Federación Internacional de Vehículos Históricos que también ha adoptado la UE, serán admisibles las reformas que eran habituales en la época de fabricación, que también "sin testimonio de una época" apostilla De las Alas.

Así, recuerda que el Seat 1500 usado mucho por los taxistas en una época se modificaron en su mayoría para que fueran diésel y, por tanto, consumieran menos.

- GRUPO B. Los vehículos importados sin documentación española o los que puedan aparecer como semi abandonados tendrán que pasar por el "laboratorio" autorizado para someterse a un examen de todas sus piezas y comprobar sus "limitaciones". Luego tendrán que seguir el resto de trámites. 

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