"El dinero del Real Madrid no es nuestro y nuestro mandato es administrarlo lo mejor posible y saber explicar a dónde va cada euro", ha reivindicado José Manuel Otero Lastres. El vocal del Madrid, célebre esta semana por haber transparentado pareceres de la Junta Directiva, perfiló la posición dentro del club que se impuso el pasado verano sobre el ansiado fichaje de Kylian Mbappé (24). Un testimonio que a buen seguro marcará la próxima Asamblea de socios que presidirá Florentino Pérez, al margen del más que positivo balance deportivo hasta la fecha, con pleno de triunfos (salvo por el 3-1 en el derbi contra el Atlético de Madrid).

Otero Lastres fue quizá demasiado claro a la hora de contestar en Remontada Blanca sobre la posibilidad de que el francés llegara a Concha Espina el pasado mercado de fichajes, para jugar la presente temporada con la 9 blanca. "Ha tenido y no ha tenido la oportunidad, a ver si me explico bien. Para venir hubiese tenido él que renunciar a unos bonus que tenía pactados con el PSG que eran muy elevados", destacó el directivo, antes que la cifra de traspaso. Y lo hizo incidiendo en que el Madrid siempre ha dejado "la puerta abierta" al francés, cuyo padre mantuvo reuniones con el presidente del PSG, Nasser Al-Khelaifi, hasta al menos dos días antes del cierre del mercado.

Así las cosas, Mbappé tendría que haber renunciado al bonus de unos 70 millones de euros que el Paris Saint Germain reclamaba al Real Madrid para zanjar la operación o, en todo caso, conseguir que la propiedad qatarí relajara aún más su petición -desde los 300 millones en total que pidió en 2021-. Y es que pese a que el jugador acaba contrato en 2024, la cúpula blanca, como informó este diario, sí estaba dispuesta a pagar al PSG hasta 180 millones de euros, el precio de mercado de la estrella según la tasadora de referencia de LaLiga, la alemana Transfermarkt. Como referencia, baste considerar que Jude Bellingham, el otro 'galáctico' de este verano, tenía un valor de mercado de 120 millones de euros al fichar por el Madrid, que se comprometió a pagar hasta 133 millones de euros entre fijos (103 millones) y variables (30 millones) al Borussia de Dortmund. "Bellingham no costó mucho dinero. Es lo mismo que un Rolls-Royce. Cuesta mucho dinero, pero no es caro. Lo que te dan por lo que pagas es muy importante", dejó caer Otero Lastres.

Una diferencia de 70 millones por Mbappé, ¿compensaba?

La suma por Mbappé, de 250 millones de una sola tacada para el PSG que lo hubieran convertido en el fichaje más caro de la historia, acabó siendo excesiva para un Madrid que sí estaba por la labor de pagar un traspaso y tenía claros los números salariales con el jugador. Pero las comisiones pactadas por el delantero con la propiedad qatarí elevaban el monto final del déficit potencial para los blancos a 450 millones. Y ello, por los 300-330 millones que resultaría de la operación en 2024 con la prima para el delantero -que de lo contrario recibiría otros 90 millones del PSG por seguir hasta 2025-, pero sin traspaso para los franceses.

Teniendo en cuenta la falta de un delantero de jerarquía y el valor de mercado de Mbappé como activo, hay quien en el Madrid consideraba que podía compensar a medio plazo. Pero el problema estaba en asumir el riesgo de un pago inmediato de 250 millones más al menos 50 millones en salario de esta primera temporada... con líneas de crédito sin disponer para todo el club por 265 millones y tesorería por 128 millones.

Puertas adentro del Madrid creció igualmente la ilusión al ver que el presidente del PSG, Nasser Al Khelaifi, mantenía reuniones con la familia Mbappé a la vez que corría contrarreloj para cerrar el fichaje de dos jugadores en su misma posición, sus compatriotas Kolo Muani y Bradley Barcola.

No por nada, la directiva que encabeza Florentino Pérez esperó hasta el final y pasó de la treintena de delanteros que le fueron ofrecidos la última semana de fichajes pese al reconocido por Otero Lastres como "roto" que dejó la salida de Karim Benzema -un 9 del estilo preferido en la directiva, no del tipo de Joselu o Haaland, según sugirió el mismo vocal- y la lesión, entonces, del delantero brasileño Vinicius JR. La Ejecutiva de Al-Khelaifi acabó el mercado europeo con la inédita cifra de ocho delanteros en su plantilla y un agujero económico de 203,5 millones.

Otero Lastres sigue siendo optimista respecto a la llegada de Mbappe en 2024, cuando llegaría "con 25 años" por "los 29" con que llegó Zidane

A estas alturas, la prensa internacional ya especula con salidas (en Inglaterra han apuntado a Ousmane Dembélé) en invierno o verano para cuadrar el nuevo fair play de UEFA en paralelo a una posible renovación del mismo Mbappé que devolvería la situación al pasado verano. Su continuidad esta temporada se ha saldado con las ventas, ya con posterioridad al mercado europeo, de Marco Verrati y Julian Draxler hacia el mismo Qatar. "Tenemos a Mbappé…y lo tendremos", fueron las últimas declaraciones al respecto de Al Khelaifi.

Otero Lastres sigue siendo optimista respecto a la llegada de Mbappé en 2024, cuando llegaría "con 25 años" por "los 29" con que llegó Zinedine Zidane. Sin embargo, "no se puede decir" que vaya a venir, matizó, para luego expresar su deseo de que el francés baje sus pretensiones económicas y siga el ejemplo de Jude Bellingham al priorizar al Madrid porque, incidió, Mbappé "alcanzará la gloria cuando venga al Real Madrid"- y confíe en los potenciales ingresos por patrocinios al unir su marca con el club blanco al margen de lo que pueda pagarle directamente la entidad merengue. "Mientras tanto, andará por ahí, deambulando, conseguirá pues a lo mejor una Champions, alguna vez".

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