La pandemia golpea a Dolores Promesas. Después de acogerse hace un año al preconcurso y aprobar dos Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) para casi una treintena de empleados, la conocida firma de moda ha dado un paso más y ha pedido el concurso de acreedores, que ya tramita el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Madrid, según fuentes consultadas por Vozpópuli. Está previsto que el auto se dicte en los próximos días.
El concurso de acreedores es una herramienta prevista en la Ley Concursal para negociar con los acreedores un convenio y evitar así la liquidación de la compañía. En el caso de la firma, los dueños ya mantienen conversaciones con los acreedores financieros y comerciales y, además, existen negociaciones para la entrada de un inversor en el accionariado, precisan las mismas fuentes. Esto es por ejemplo lo que ocurre con Dentix, que aunque está en concurso, mantiene negociaciones avanzadas con el fondo Advent para comprar una parte de las clínicas, lo que le permitirá mantener su actividad.
La marca de moda fue fundada en 2005 por la diseñadora Alicia Hernández y dos socios, Javier Lapeña y Miryam Pintado. Los tres han permanecido al timón de la compañía hasta este pasado verano, cuando Hernández anunció su salida de la compañía. Hasta ese momento, era la directora creativa de la firma. Lapeña y Pintado se mantienen al frente. El primero mantiene un 27% del accionariado y Gallery Room, agencia a la que pertenece Pintado, controla el 54%.
Dolores Promesas había ganado mucha notoriedad en los últimos años después de que muchas famosas, en especial la actriz Paula Echevarría, promocionasen algunas de sus prendas en eventos y redes sociales. Otras compañeras de gremio como Blanca Suárez e Inma Cuesta, así como Amaia Romero, ganadora de Operación Triunfo 2017, también contribuyeron a dar alas a la marca.
Cierre de tiendas
Aunque la marca ya se encontraba en una situación delicada antes de la pandemia, el desplome de ventas en el sector retail provocado por la pandemia ha agravado la situación de la compañía, que en los últimos meses ha cerrado los 12 corners que tenía en El Corte Inglés y ha prescindido de 14 tiendas. Antes de la crisis sanitaria, contaba con 10 tiendas propias y 17 franquicias. Además, en aras de acercarse a un público más joven, la firma decidió hace un año rebajar el precio de una parte de la colección para captar nuevas clientas.
Según las últimos datos disponibles en el Registro Mercantil, Dolores Promesas (nombre comercial de Leyenda Personal SL y Leyenda Personal Retail SL) facturó en 2018 un total de 9,85 millones de euros.